- Los jubilados temen que tras el Brexit se endurezcan las leyes para instalarse en la costa mediterránea
- El Reino Unido es el principal mercado del turismo español y la compra de vivienda por parte de extranjeros
Los jubilados del Reino Unido están decididos a evitar las consecuencias de la salida de su país de la Unión Europea. Según apunta la prensa británica con datos recogidos por asesores financieros de la isla, el negocio de las consultoras que ayudan a los pensionistas en su ‘retiro dorado’ en la costa mediterránea con la burocracia ha aumentado un 25% en un año.
En concreto, en España viven cerca de 295.000 británicos, en lo que es ya la tercera comunidad extranjera en el país, sólo por detrás de rumanos y marroquíes, según los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE). Según estas estadísticas, entre el 1 de enero de 2016 y la misma fecha de 2017, la cantidad de británicos en España se redujo en 2.113 personas, un 0,7% menos. Los datos de la Oficina Nacional de Estadística (ONS) británica muestran que un 48% de los ‘british’ que vive en España está jubilado, y reside en zonas costeras de la Comunidad Valenciana, Andalucía, Canarias, Cataluña o Baleares.
“Tras el Brexit algunos jubilados vendieron sus casas y regresaron a Reino Unido, estaban preocupados por la situación y no querían esperar en caso de que hubiera problemas. Ahora creo que la gente está aburrida con el proceso de negociación del Brexit y casi se ha olvidado porque no ha pasado nada. En los últimos meses, ha habido un repunte de las compraventas y la gente joven también está comprando viviendas. No tengo datos concretos, pero en los últimos meses he tenido más actividad en la oficina de lo normal”, explica Tina Brown, gerente de la consultora Expat Solutions, con sede en la localidad alicantina de San Fulgencio.
El aumento de la actividad de los consultores británicos se explica porque los jubilados temen que tras la salida del Reino Unido de la UE las leyes se endurezcan y sea más complicado instalarse en cualquier país de los 27 siendo extracomunitario. El debate gira en torno a los derechos sanitarios o las trabas administrativas para cobrar la pensión fuera del país.
La libra esterlina se ha devaluado cerca de un 12% frente al euro desde el referéndum sobre el Brexit
Sin embargo, otra de las cuestiones que también preocupa a los británicos jubilados es la depreciación de la libra frente al euro, por lo que su capacidad de compra se reduce. La divisa británica se ha devaluado cerca de un 12% frente a la moneda común desde el referéndum sobre el Brexit. Una de las consecuencias directas de esta caída de la libra esterlina es que la inflación de la economía británica se sitúa en el 2,6% interanual en julio, lejos del 1,5% del conjunto de la UE y del 1,3% de la Eurozona, según los datos de Eurostat. Sólo Lituania y Estonia presentaron en julio un IPC interanual más elevado que el Reino Unido.
“Muchos británicos no tienen ni idea de lo que está sucediendo con la negociación del Brexit y los medios de comunicación del país llevan información contradictoria. Pero trasladarse a otro país con otro idioma y cultura no es un pícnic en el parque, necesita organización. Esto es tan importante ahora como cuando se produjo la gran oleada de británicos que se trasladaron a España en los primeros años del siglo”, apunta Margaret Hales, portavoz de la plataforma Derechos del Ciudadano Expatriado en la UE (ECREU, por sus siglas en inglés).
Hales, británica afincada en la localidad alicantina de Benitatxell durante 11 años, apunta que “hay miedo entre muchos jubilados británicos. Sus planes han sido arruinados por el Brexit. La incertidumbre es horrible cuando tienes más de 80 años y puedes vivir aquí en España otros 20 años más”.
LA EMBAJADA LANZA UN MENSAJE DE TRANQUILIDAD
Desde la Embajada del Reino Unido en España tienen un discurso tranquilizador y optimista frente a la negociación del Brexit, pese a los mensajes contradictorios que llegan desde la isla entre los que se cuelan los partidarios de un Brexit duro y la “unión aduanera temporal” propuesta por el Gobierno de Theresa May la pasada semana.
“La posición del Reino Unido es que aunque estemos fuera de la UE, queremos seguir siendo sus aliados más cercanos, sus mejores amigos y sus socios más fiables. Tras la salida del Reino Unido de la UE, proponemos un acuerdo recíproco que proteja el derecho de los ciudadanos británicos que viven en países de la Unión y les permita continuar viviendo su vida tal y como hasta ahora, y esperamos que la Comisión Europea y los otros 27 Estados miembro acepten esta propuesta”, indican fuentes de la Embajada.
Como señala la Embajada, en las últimas semanas el Ejecutivo de May ha jugado la carta de una transición suave en la salida de su país de la UE, sobre todo en lo que respecta al mercado común y al comercio. El Ministerio para la Salida de la UE irá concretando a lo largo de los próximos meses sus propuestas respecto a la relación entre su país y el bloque comunitario con el objetivo de mantener la "profunda y especial" relación entre ambos como apuntó el ministro David Davis.
ESPAÑA NECESITA A LOS TURISTAS Y A LOS JUBILADOS BRITÁNICOS
Para España, desde luego, el mercado británico es clave. La compra de viviendas por parte de extranjeros supuso un 13% del total de unidades vendidas en 2016, unas 53.500 viviendas, y las previsiones para este 2017 es que aumente esa cifra, según el 'Informe del Mercado Residencial' elaborado por la consultora inmobiliaria JLL.
Por nacionalidades, los británicos fueron los que más viviendas adquirieron. Un 19% de las operaciones realizadas tenía detrás a un comprador británico, frente al 8% de compradores franceses, el 7,6% que fueron ciudadanos alemanes, el 6,7% suecos, el 6% belgas y el 5,4% italianos. Desde JLL apuntan que el Brexit y el comportamiento de la libra esterlina justifican el descenso del 24% experimentado en la compra de vivienda por parte de los británicos con respecto a 2015.
Reino Unido también es el principal emisor de turistas a España. De hecho, pese al descenso en la compra de viviendas, en 2016 se incrementó el número de británicos que vinieron a España hasta los 17,8 millones de turistas, el 23% de todas las visitas que recibió el país, según recoge un informe del Banco de España. También el gasto de los británicos creció un 12,8% hasta situarse en los 16.000 millones de euros.
Pese al Brexit, Reino Unido sigue siendo una fuente de ingresos vital para España, sobre todo en sectores como el turismo, el comercio o la construcción, que tienen fuerte dependencia de mano de obra y son los sectores que mayor empleo crean entre los parados de larga duración, como recoge un estudio de Asempleo y Analistas Financieros Internacionales (AFI).