El dólar ha alcanzado máximos de una semana la madrugada de este miércoles, en las 1,1730 unidades contra el euro, en la antesala de la decisión de tipos de interés de la Reserva Federal de EEUU. El ‘billete verde’ recibe empuje de los inversores, cuando todas las miradas se dirigen a las proyecciones de subidas de tasas de interés de este 2018.
La unanimidad es absoluta sobre que el banco central eleve el rango objetivo al 1,75% - 2,00% este miércoles, sin embargo los expertos se dividen acerca de si el banco central ofrecerá pistas sobre si serán tres o cuatro los incrementos del precio del dinero de este año. Los analistas de Danske Bank no creen que en esta reunión se den “grandes cambios en las proyecciones, como mucho el comunicado puede cambiar a que ‘la política monetaria es modestamente acomodaticia’, añadiendo el adjetivo ‘modesto’”. “Este no es un cambio en la estrategia, simplemente significa que el ciclo de subidas ya ha recorrido un largo camino”, agregan.
Otro aspecto a tener en cuenta es que “la reciente turbulencia de los mercados emergentes podría impedir que la Reserva Federal acelere el ritmo de sus alzas en las tasas. Por lo tanto, el dólar se beneficiará si la Fed insinúa que se prepara para subir cuatro veces los tipos este año", indican por su parte los analistas de divisas de Mizuho Securities.
Por el momento, además de enseñar músculo ante el euro, la divisa estadounidense ha dejado alzas en el índice que mide su desempeño ante una cesta de rivales, hasta los 93,88 puntos. Y, frente al yen, planea sobre los máximos de tres semanas del martes, en los 110,68 yenes.
LA TENDENCIA DEL EURO VENDRÁ MARCADA POR EL BCE
Desde el punto de vista del análisis técnico, José María Rodríguez, analista de Bolsamanía, explica que la fortaleza del 'billete verde' puede llevar otra vez al euro a los mínimos de 2017. "El soporte a respetar sí o sí en el euro/dólar lo situamos en los 1,15", asegura.
Con todo, el mercado esperará a la decisión de tipos de interés del Banco Central Europeo (BCE) y a la rueda de prensa de su presidente, Mario Draghi, para decidir cual será la tendencia de la moneda compartida en el corto plazo. En las últimas jornadas, la divisa compartida ha experimentado un auge ante las expectativas de que el supervisor monetario indique una fecha para el fin de los estímulos, después de que varios miembros de su comité ejecutivo apuntaran a que en la reunión que empieza este miércoles en Riga (Letonia) se discutirá cómo finiquitar las compras de activos.
Sin embargo, varias voces se alzan avisando que un anuncio este jueves es muy prematuro. Desde Danske Bank esperan que se posponga hasta agosto o incluso septiembre, mientras que Mizuho cree que el BCE decepcionará al mercado ya que "la retórica será mucho más flexibilizadora y moderada".