Este 5 de febrero comienza oficialmente el Año del Cerdo en China. Los chinos esperaban con anhelo el inicio de este nuevo periodo, y es que el cerdo es un animal que simboliza la riqueza y que está ligado a la buena suerte y la prosperidad. Ahora lo que todos se preguntan es si el Año del Cerdo ayudará al gigante asiático con los retos que tiene por delante, sobre todo en lo referente a la guerra comercial con EEUU.
Los expertos coinciden al señalar que son muchos los desafíos que China tiene por delante en los próximos doce meses. Al menos en materia económica, porque no solo negocia a contrarreloj para evitar la guerra comercial con EEUU (el próximo 1 de marzo entrarán en vigor los aranceles del 25% a las exportaciones chinas impuestos por el gobierno de Donald Trump si no hay acuerdo), sino que además tendrá que lidiar con la ralentización económica, que seguirá la línea de lo ocurrido en 2018, cuando el PIB creció a su ritmo más lento en casi tres décadas, aunque sigue por encima del 6%. Y eso sin olvidar la deuda que arrastra.
No obstante, según la leyenda china el cerdo es una señal de buena fortuna, lo que lleva a pensar en el potencial económico que el país tiene por delante este año. Así lo creen los expertos de Allianz, que señalan que "los altos niveles de deuda, el crecimiento más lento y la guerra comercial son problemas a largo plazo que no se pueden resolver de la noche a la mañana, pero creemos que el gobierno de China tiene las herramientas adecuadas para resolverlos". Estos analistas ven con esperanza la llegada del Año del Cerdo, y lo que puede suponer para la economía asiática tras el 'desastroso' Año del Perro que se acaba de terminar.
Noticia relacionada
Trump y Xi Jinping planean una cumbre en Vietnam a finales de febreroDe momento los chinos disfrutan de la semana de vacaciones del Año Nuevo Lunar que mantendrá cerradas las bolsas desde el 4 hasta el 11 de febrero, periodo que ayudará a China a coger aire para enfrentarse con ánimos renovados a los retos que le esperan. El primero de ellos, retomar las negociaciones con EEUU tras los intensos días que ambos equipos, el chino y el estadounidense, pasaron en Washington la semana pasada. La siguiente reunión se celebrará en Pekín a mediados de febrero, y aunque todo son buenos augurios y crece la esperanza de que la disputa comercial entre ambos países se relaje, hay que recordar que aún no hay acuerdo y puede que si llega lo haga 'in extremis'. Trump dijo que no cerraría nada hasta verse con su "amigo" Xi Jinping, y ya se baraja una cumbre entre ambos mandatarios en Vietnam a finales de febrero, justo antes de la fecha prevista de entrada en vigor de los aranceles de EEUU a China.
ASÍ AFECTARÁ EL AÑO DEL CERDO A LOS MERCADOS
Además, otra pregunta recurrente cada vez que cambia el calendario chino es la de cómo afectará el nuevo año a los mercados. Los inversores 'quemados' en la derrota bursátil de 2018 estarán encantados de dejar atrás el Año del Perro, con la esperanza de que el Año del Cerdo ayude a la renta variable mundial a mantener la buena racha con la que ha iniciado 2019. Desde Selftrade lo tienen claro: "La otra cara de un mal año -los principales índices chinos han caído más de un 20% en los últimos doce meses- es que las valoraciones de la renta variable china se han vuelto más atractivas, lo que indica un potencial para los inversores a medio plazo".
Las acciones chinas están descontando un resultado bastante negativo en la guerra comercial, por lo que "cualquier acuerdo con EEUU podría ser el primer paso hacia la recuperación de los mercados de valores"
Una idea con la que coinciden los expertos de AJ Bell, que señalan que "las previsiones de los analistas sitúan las acciones chinas en unas 10,5 veces los beneficios previstos para 2019, lo que supone un descenso de entre 14 y 15 veces respecto al año pasado. Un descenso tan pronunciado de la calificación apunta a una gran pérdida de confianza en las acciones chinas, aunque también sugiere que no se necesita demasiado para convencer al dinero para que regrese, ya que las expectativas son ahora más bajas y, por lo tanto, más fáciles de vencer". Es más, desde esta casa apuntan que las acciones chinas están descontando un resultado bastante negativo en la guerra comercial, por lo que "cualquier acuerdo con EEUU podría ser el primer paso hacia la recuperación de los mercados de valores".
Más al detalle, desde MainFirst ven oportunidades en los sectores cíclicos y los activos de riesgo, que "podrían tener un buen desempeño". Y también animan a los inversores a apostar por la deuda high yield china. "Las valoraciones se han reducido de forma significativa durante el ultimo año, con muchos bonos ofreciendo rentabilidades de doble dígito", remarcan los expertos de esta firma alemana, que remarcan que "tanto los bonos corporativos como soberanos high yield y la renta variable ofrecen un valor significativo, ya que muchos inversores se muestran extremadamente bajistas".
Desde Allianz señalan que a muy largo plazo "es casi seguro que China se convertirá en la mayor economía del mundo", por lo que aseguran que ahora es el momento de pensar en cómo asignar parte de la inversión a China, del mismo modo que se piensa en cómo asignar a EEUU. Y qué mejor que hacerlo en el Año del Cerdo, ligado a la riqueza y la prosperidad.