Se cumplen los peores pronósticos. El consenso esperaba que las peticiones semanales de desempleo en EEUU escalaran por encima de los 5 millones, pero los más pesimistas hablaban de cifras de 6 millones. Al final, se han disparado hasta los 6,6 millones. Esto, después de un incremento de cerca de 10 millones en las últimas dos semanas.
Wall Street sube pese a estas malas noticias. Y es que, prácticamente al mismo tiempo, se ha conocido que la Fed inyecta otro paquete de ayudas para hogares y empresas de 2,3 billones de dólares. Además, aunque peor de lo esperado, el dato ya se anticipaba muy malo y, en cierto modo, parece que los inversores se han 'acostumbrado' tras las pésimas noticias de empleo de las últimas semanas.
La pasada semana se comunicó que las peticiones de desempleo semanales de EEUU se habían disparado otros 6,6 millones en la semana del 27 de marzo, una referencia que también fue peor de lo esperado por los analistas, que anticipaban 3,5 millones de peticiones.
Previamente, el dato registrado en la semana del 20 de marzo fue de más de 3 millones y ya se situó como la mayor cifra registrada hasta ese momento.
Los expertos dicen que estos datos reflejan la gravedad de la recesión y la velocidad de la misma en Estados Unidos debido al impacto del coronavirus, y siguen anticipando datos nefastos en este sentido para las próximas semanas.