- El organismo destaca que esos niveles son 'malos para el crecimiento'
- Chile, México, Turquía, EEUU e Israel, los países con más diferencias
- Dinamarca, Eslovenia, República Checa y Noruega, los que menos
Los extremos siguen creciendo. El último informe de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) ha señalado un nuevo récord, el de la desigualdad, Según el documento, la brecha entre ricos y pobres que elabora anualmente el organismo está en sus máximos históricos desde que existen registros.
Chile, México, Turquía, Estados Unidos e Israel son los países desarrollados con más desigualdad
En la presentación, el secretario general de la OCDE, Ángel Gurría, ha señalado que hemos “alcanzado un punto de inflexión porque la desigualdad en los países de la OCDE está en su nivel más alto desde que existen registros. Las pruebas muestran que la alta desigualdad es mala para el crecimiento”, señaló, según recoge EFE.
Según el informe, Chile, México, Turquía, Estados Unidos e Israel son los países desarrollados con más desigualdad, frente a la mayor armonización salarial de Dinamarca, Eslovenia, República Checa y Noruega.
El organismo destaca que el 10% de la población del llamado "club de los países ricos" gana 9,6 veces más que el 10% más pobre, una proporción que se ha incrementado respecto a la diferencia 7-1 de los años ochenta y del 9-1 de inicios del siglo actual.
En 2012, el 40% de los hogares más pobres de los 18 países de la OCDE con datos comparables disponía de solo el 3% de la riqueza, mientras que el 10% más favorecido "controlaba la mitad de la riqueza de los hogares". "El 1 % más rico poseía el 18%" de la fortuna del conjunto de los hogares analizados, destaca el estudio.
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LA INFLUENCIA DE LA DESIGUALDAD EN LOS EMPLEOS Y LA ECONOMÍA
Para Gurría, "al no atacar las desigualdades, los gobiernos cortan el tejido social de sus países y dañan el crecimiento económico a largo plazo". Además, destaca que "el creciente porcentaje de gente que trabaja a tiempo parcial, con contratos temporales o a través del autoempleo, es un eje importante de la creciente desigualdad", apuntan los investigadores de la OCDE.
La mitad de los empleos creados en los países miembros de esa organización entre 1995 y 2013 eran precarios y "los trabajadores temporales y poco cualificados, en particular, tienen muchos menos ingresos y más inestables que los permanentes".
LA PRECARIEDAD DEL EMPLEO JUVENIL
El informe de la institución pone el foco en los jóvenes, ya que son los más afectados por la precariedad, ya que el 40% no disfruta de un puesto de trabajo convencional y la mitad de los contratos temporales los firman personas que aún no han cumplido los 30 años.
Otro factor clave para analizar el problema es la desigualdad de género. El creciente número de mujeres trabajando ha "ayudado a frenar la desigualdad", pero éstas siguen cobrando un 15 % menos que los hombres.
La proporción de hogares con mujeres que trabajan "se ha mantenido en niveles de hace 20 o 25 años, pero la desigualdad de ingresos ha crecido", agrega el estudio.
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