- Las actas pertenecen a la reunión de los pasados 31 de enero y 1 de febrero
- Esta fue la primera reunión con Trump como presidente de EEUU
La subida de tipos en EEUU llegará “muy pronto”. O por lo menos eso es lo que muestran las actas de la última reunión, celebrada los pasados 31 de enero y 1 de febrero, la primera con Donald Trump como presidente de EEUU. El documento muestra que muchos miembros expresaron que sería apropiado subir pronto los tipos si la economía sigue así.
"Muchos participantes expresaron su visión de que podría ser apropiado elevar, de nuevo, los tipos de interés muy pronto, si la información recibida en el mercado laboral y la inflación está en línea o es más fuerte que las expectativas actuales", señaló la Fed en su reunión de política monetaria de finales de enero.
La mayoría del órgano ejecutivo de la Fed tan solo observa un "riesgo modesto" de que las presiones inflacionistas se incrementen
Los miembros del Comité de Gobierno de la Fed (FOMC) coincidieron en que había una mayor incertidumbre acerca de los efectos de los posibles cambios en las políticas fiscales y de otros gobiernos, pero que los riesgos a corto plazo para las perspectivas económicas parecían más o menos equilibrados. Muchos miembros siguieron viendo sólo un modesto riesgo de un escenario en el que la tasa de desempleo superaría sustancialmente su nivel normal a más largo plazo y las presiones inflacionarias aumentarían significativamente, aunque si observaron algunos riesgos a la baja asociados a la apreciación del dólar.
Además, la mayoría de los participantes continuó viendo una mayor incertidumbre en cuanto al tamaño, la composición y el calendario de posibles cambios en las políticas fiscales y de otro tipo, así como sus efectos netos sobre la economía y la inflación a mediano plazo. "Necesaria para que la perspectiva se aclare", apuntan en el documento.
En el contexto económico actual, no obstante, la mayoría del órgano ejecutivo de la Fed tan solo observa un "riesgo modesto" de que las presiones inflacionistas se incrementen de forma significativa y, aún así, consideran que la institución dispone de "tiempo de sobra" para responder ante ellas.
En esta línea, Yellen ya reconoció durante su comparecencia semestral ante el Senado y el Congreso de EEUU, que esperar más de la cuenta para normalizar la política monetaria podría resultar "imprudente", aunque precisó que la política monetaria estadounidense no tiene un rumbo preestablecido y las decisiones del banco central dependerán de la evolución de las perspectivas.
La mayoría de los miembros, además, se mostró de acuerdo en que sería apropiado disminuir el nivel de los activos en posesión de la Fed, dadas las presiones a la baja sobre los tipos a largo plazo que está generando el balance de la institución.
El mercado ha elevado ligeramente su previsión de subida de tipos en marzo hasta el 17%, pero realmente no espera un aumento de los intereses en EEUU hasta junio (otorga un 73% de posibilidades a esa reunión). La próxima reunión será el 14 y 15 de marzo, que además contará con la intervención posterior de Janet Yellen.