La presidenta del Banco Central Europeo (BCE), Christine Lagarde, no ha dado pistas de cómo actuará el organismo que preside en la reunión de julio. “Adoptaremos todas las medidas necesarias para cumplir el mandato del BCE de perseguir la estabilidad de precios y contribuir a salvaguardar la estabilidad financiera”, esa ha sido la respuesta de la banquera gala al ser preguntada por una posible subida de tipos en verano.
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Lagarde, que ha participado en una mesa redonda organizada por el Fondo Monetario Internacional (FMI), ha señalado que la política monetaria de la Unión Europea “dependerá de los nuevos datos que lleguen y de la evolución de nuestras evaluaciones de las perspectivas”, por lo que “en las actuales condiciones de elevada incertidumbre, mantendremos la opcionalidad, gradualidad y flexibilidad en la conducción de la política monetaria”. “No tiene sentido fijar un día o un plazo (para una subida de tipos), estamos esperando hasta que tengamos todos los datos”, ha añadido.
Asimismo, la presidenta del BCE ha indicado que la inflación, extendida en la eurozona y muy por encima del objetivo del 2%, sigue siendo “una inflación por el lado de la oferta” y por ello “debe abordarse gradualmente”. “Con los datos de julio determinaremos en qué momento del tercer trimestre hay que poner fin a las compras netas y si es necesaria una subida de tipos”, ha explicado.
GUINDOS RESPALDA A LOS HALCONES
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En una entrevista con 'Bloomberg', el vicepresidente del BCE, Luis de Guindos, se ha mostrado más cercano a los ‘halcones’ del banco central, con unas declaraciones que contrastan enormemente con lo anunciado por Lagarde en la rueda de prensa de la reunión del banco central del mes de abril, hace exactamente una semana.
"No veo ninguna razón por la que no debamos interrumpir nuestro programa de compra de activos en julio", ha añadido Guindos, en línea con la postura oficial del BCE, que la semana pasada confirmó que el programa de compras finalizará en junio, como muy tarde. "Para la primera subida de tipos tendremos que ver nuestras proyecciones, los diferentes escenarios", pero "desde la perspectiva actual, julio es posible y septiembre, o más tarde, también es posible. Veremos los datos y sólo entonces decidiremos".
Hace apenas siete días, Lagarde enfatizó que la secuencia estaba clara: primero, acabar con las compras; después, subir tipos. "Aún no estamos allí", aseguró.
