La presidenta del Banco Central Europeo (BCE), Christine Lagarde, ha reconocido este jueves que el actual "entorno inestable plantea riesgos considerables para la estabilidad financiera de Europa".
En la presentación de la Sexta Conferencia Anual de la Junta Europea de Riesgo Sistémico (JERS), Lagarde ha enumerado una serie de "fuertes sacudidas" -la pandemia, la "injustificable" invasión de Ucrania por Rusia y la crisis energética-, que han golpeado la economía mundial de forma sucesiva.
"Esos riesgos se ven agravados por las perspectivas económicas", ha añadido, al tiempo que la política monetaria se está ajustando para garantizar que la elevada inflación no se consolide y que vuelva al objetivo del 2% a medio plazo.
En este contexto, la presidenta del BCE ha dicho que "la resistencia es clave" para ayudar al sistema financiero a cumplir su objetivo de apoyar a la economía real, y que es "crucial" garantizar esa resistencia.
Según Lagarde, hay dos facetas de esa resistencia que son vitales. En primer lugar, la capacidad del sistema financiero de resistir un "choque inmediato" y, en segundo lugar, la capacidad de adaptarse eficazmente a las nuevas condiciones.
"Sigue siendo importante que los bancos hagan las provisiones adecuadas y lleven a cabo una planificación prudente del capital", ha dicho la máxima responsable del BCE. "Deben estar atentos a los riesgos de crédito y permanecer alerta ante posibles fallos en sus modelos internos a medida que evoluciona el entorno de riesgo", ha añadido.
Los bancos también tienen un papel clave que desempeñar para contribuir a la resiliencia, teniendo una buena visibilidad de los riesgos de liquidez a corto plazo y planes concretos para hacerles frente; fuertes defensas cibernéticas; y la capacidad de soportar las ventas forzosas y el impacto asociado a la valoración a precios de mercado de los activos mantenidos en sus balances, ha añadido Lagarde. "Si no se gestionan adecuadamente, todos estos tipos de riesgos son especialmente susceptibles de amplificar y propagar las perturbaciones a través del sistema financiero", ha advertido.
Asimismo, Lagarde ha dicho que el refuerzo de la resistencia no puede limitarse a los bancos, ya que las entidades no bancarias también desempeñan un papel cada vez más importante en el sistema financiero. La proporción de financiación no bancaria en el crédito total de las instituciones financieras a la economía real ha aumentado de alrededor del 15% a aproximadamente una cuarta parte desde 2009. Para que estas fuentes alternativas de financiación funcionen de manera fiable, estas instituciones también deben ser resistentes a las perturbaciones, ha asegurado.