La Reserva Federal de Estados Unidos (Fed) mantuvo ayer los tipos de interés en el 2,25%-2,5%, pero no aclaró si piensa reducirlos. Su presidente, Jerome Powell, apuntó que actuarán "según corresponda para sostener la expansión" y el banco central eliminó la expresión "paciente" de su comunicado, lo que alimenta las conjeturas de una posible rebaja antes de que finalice el año. Wall Street reaccionó con leves subidas, mientras que los analistas no se ponen de acuerdo. Algunos apuntan a una rebaja de las tasas para septiembre y otros consideran que llegará en 2020.
El equipo de análisis de ING considera que "la Fed ha abierto la puerta a los recortes de tasas, pero puede que no sea tan agresiva como espera el mercado". Así, mantiene su pronóstico de recorte de tasas en septiembre y diciembre, aunque si los datos macroeconómicos siguen deteriorándose y la reunión de la próxima semana entre el presidente estadounidense, Donald Trump, y su homólogo chino, Xi Jinping va mal, están "abiertos a pasar las rebajas a julio y septiembre".
Las perspectivas de Estados Unidos son cada vez más inciertas. Los datos macroeconómicos y, sobre todo, la inversión de la curva de tipos auguran una nueva crisis financiera, que según los expertos llegará en 2020. De hecho, la Fed ya se ha guardado las espaldas y ha modificado, de "sólido" a "moderado", su valoración sobre el crecimiento económico del país.
El analista de Mercado de Divisas en Monex Europe, Bart Hordijk, cree que a pesar de que la Fed ha eliminado la palabra "paciente" de su comunicado, "todavía estaba muy presente en espíritu" durante la rueda de prensa de Powell. El banquero repitió en varias ocasiones que le gustaría ver más evidencias antes de entrar en acción, lo que "sugiere que un recorte para julio "es demasiado pronto" y que para septiembre "es más probable".
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Powell gana tiempo hasta conocer el desenlace de la reunión entre Trump y XiPara el presidente de la Fed de St. Louis, James Bullard, los tipos tendrían que haberse bajado en esta reunión. Fue el único miembro con derecho a voto que apostó por una rebaja de 25 puntos básicos. Sin embargo, ninguno de los 17 miembros espera una reducción de más de 50 puntos básicos en los próximos años, lo que "será una decepción para los mercados", según Capital Economics.
Con esta situación, la consultora inglesa refuerza su idea de que "el primer recorte de tasas se retrasará hasta septiembre, con otra reducción de 25 puntos básicos en diciembre y luego un recorte final en marzo del próximo año".
MENSAJES CONFUSOS
El mensaje de la Fed ha sido "algo confuso", según Mike Fratantoni, economista jefe de la Asociación de Banqueros Hipotecarios. Si bien es cierto que reconoce una perspectiva más incierta, "no sugiere que pronto se produzca un recorte de tipos". Por ello, apunta que la media de los funcionarios de la Reserva Federal considera "que las tasas se mantendrán estables y se reducirán en 2020".
"Los mercados tendrán dificultades para digerir estos mensajes mixtos que indican que la Fed reconoce una desaceleración, pero aún no se ha comprometido a reducir las tasas este año", ha declarado para Wall Street Journal.
Desde Pantheon Macroeconomics remarcan que todo dependerá del comercio. Si las negociaciones comerciales van mal en el G20 y las bolsas caen bruscamente, la Reserva Federal "lo estudiará en julio". Pero para ellos, los nuevos pronósticos muestran que ocho miembros esperan que las tasas "no se modifiquen este año", mientras otros ocho buscan un alza de 25 puntos básicos y uno espera un aumento.
La previsión para finales de 2020 se ha reducido en 50 puntos básicos y la estimación de finales de 2021 ha bajado 25 puntos básicos. "En otras palabras, ahora esperan que tasas se queden sin cambios este año", una flexibilización de 25 puntos básicos el próximo y una subida de 25 puntos básicos en 2021, detallan. Dado que esta no es una visión colectiva de la Fed, describen las expectativas de tasas "como esencialmente planas para el futuro próximo".
Por su parte, desde Capital Economics explican que al abandonar su postura "paciente", indican que, ante el aumento de las "incertidumbres" que rodean la perspectiva económica, actuarán según corresponda, pero eso "está muy lejos de señalar que se producirá un recorte de tasas".