les gens marchent dans une rue commercante photo prise le 17 janvier 2015 a konstanz en l allemagne

El Producto Interior Bruto (PIB) de Alemania se contrajo un 0,3% en 2023, según los datos preliminares publicados por Destatis, la Oficina Federal de Estadística, desde donde remarcan que "las consecuencias de la crisis mundial están ejerciendo presión sobre la economía alemana". Un año antes, en 2022, registró un crecimiento del 1,8%.

"El desarrollo económico general en Alemania se estancó en 2023 en un entorno todavía plagado de crisis". Como ha explicado la presidenta de Destatis, Ruth Brandt, a pesar de las recientes caídas, los precios se mantuvieron altos en todos los niveles y perjudicaron la economía.

"A esto se sumaron las condiciones financieras desfavorables debido al aumento de los tipos de interés y la menor demanda interna y externa", ha añadido.

El consumo privado cayó un 0,8% respecto al año anterior, algo que probablemente se deba a los altos precios. El consumo público descendió un 1,7% y la inversión, un 0,3%.

Por sectores, la producción económica en el sector manufacturero (excluida la construcción) cayó un 2%. El factor decisivo fue una producción mucho menor en el sector del suministro de energía, mientras que los impulsos positivos provinieron principalmente de la industria del automóvil y de otras fabricaciones de vehículos.

En la construcción, además de los elevados costes y la escasez de trabajadores cualificados, se hicieron especialmente evidentes las condiciones de financiación cada vez más deficientes. Esto afectó especialmente a la construcción de edificios. Por el contrario, aumentó la producción en el sector de la ingeniería civil y el sector de acabados.

Por su parte, la mayoría de los sectores de servicios pudieron expandir nuevamente sus actividades económicas en comparación con el año anterior y apoyaron la economía en 2023. Sin embargo, el aumento general fue más débil que en los dos años anteriores.

El sector de la información y las comunicaciones registró el mayor crecimiento, con un 2,6%. El sector de servicios públicos, la educación, la salud (1%) y los proveedores de servicios empresariales (0,3%) también experimentaron un ligero crecimiento. Por el contrario, el sector económico de comercio, transporte y hostelería cayó un 1% principalmente por el comercio mayorista y minorista, que cayó significativamente, mientras que el comercio de vehículos de motor y el sector del transporte aumentaron.

RIESGO ALTO DE QUE 2024 SEA OTRO AÑO DE RECESIÓN

"El año 2023 fue el primer año completo desde 2020 en el que la economía alemana se contrajo", destacan los expertos de ING. "Sin embargo, esta estimación se obtuvo sin datos económicos concretos para el mes de diciembre y aún podría estar sujeto a revisiones, probablemente más a la baja que al alza", señalan. Para ellos, "la dura realidad económica no parece agradable".

De hecho, de cara al futuro, al menos en los primeros meses de 2024, creen que muchos de los recientes obstáculos al crecimiento seguirán presentes y, en algunos casos, tendrán un impacto aún mayor que en 2023. "En definitiva, esperamos que continúe el estado actual de estancamiento y recesión superficial. De hecho, el riesgo de que 2024 sea otro año de recesión es alto".

Calculan que la economía alemana se contraerá un 0,3% interanual este año. "Sería la primera vez desde principios de la década de los 2000 que Alemania atraviesa una recesión de dos años, aunque podría resultar superficial".

Para los expertos de Oxford Economics, los datos confirman sus expectativas de una contracción en la economía más grande de la eurozona durante el cuarto trimestre "y allana el camino para un 2024 muy débil".

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