monedaalaire1

Caen las expectativas de inflación a la vez que se registra un alivio en el riesgo de recesión en la zona euro. Y esto puede reducir las probabilidades de subida de tipos de interés, según apuntan los analistas. De hecho, creen que la próxima decisión del Banco Central Europeo (BCE), que tendrá lugar en septiembre, será como lanzar una moneda al aire.

"Seguimos viendo la decisión de la subida de tipos de septiembre como un lanzamiento de moneda con una ventaja estrecha para una subida más dado el enfoque del consejo en las medidas actuales de la inflación subyacente, que apenas están empezando a caer. Pero las cifras de crecimiento más pesimistas o las señales de un mercado laboral más débil aún podrían desviar la atención del consejo".

Así lo expresan desde Oxford Economics después de que las expectativas de inflación a medio plazo se acercan cada vez más al objetivo del 2% del BCE, lo que hace probable que debilite aún más los argumentos de que se necesitan más aumentos de la tasa oficial para que la inflación regrese de manera sostenible al ese objetivo.

Según la Encuesta de Expectativas del Consumidor del BCE de junio, las expectativas de inflación al consumidor en la eurozona cayeron a su nivel más bajo desde febrero de 2022, antes de la invasión rusa de Ucrania, con un descenso generalizado en todos los países. "Esto reduce las probabilidades de que el consejo del BCE implemente nuevas subidas de tipos a finales de este año", añaden los expertos, que matizan: "Todavía no estamos convencidos de que el BCE se salte la subida de septiembre, aunque la campaña de ajuste está claramente cerca de su fin y las probabilidades de nuevas subidas de tipos a finales de este año se reducen".

Por el momento, la obstinada inflación de los servicios plantea una grave preocupación para el BCE, ya que podría acelerar aún más las presiones sobre los salarios y los precios. La tasa general del Índice de Precios de Consumo (IPC) de la zona euro descendió hasta el 5,3% en julio. Por el contrario, la inflación subyacente se mantuvo en el 5,5%. "La inflación sigue siendo demasiado elevada para estar cómodo, en particular con la inflación de los servicios aumentando a un ritmo récord", señalan en Danske Bank.

Siguen estimando una tasa de referencia máxima del 4% en septiembre (aumento de 25 puntos básicos), "aunque nuestra predicción se ve cuestionada por datos a la baja, como PMI débiles y la encuesta de préstamos bancarios malignos". En este sentido, en Generali Investments consideran que el BCE podría ser demasiado optimista de cara a septiembre: "Aunque el PIB mostró un repunte esperado del 0,3% intertrimestral en el segundo trimestre, la publicación de los índices PMI de julio pone de relieve el riesgo de retroceso de la actividad en el tercer trimestre".

Recuerdan que, en su reunión de julio, el BCE adoptó una postura verdaderamente dependiente de los datos, aunque considera que la inflación sigue siendo demasiado alta durante demasiado tiempo, ya no ve la necesidad de subir necesariamente más los tipos. "Una retórica mucho más equilibrada hace que nuestra previsión de una nueva subida de 25 puntos básicos hasta el 4% en septiembre sea muy ajustada", dice Martin Wolburg, economista senior.

"Dudamos de que las perspectivas de inflación actualizadas sean lo suficientemente benignas como para dejar de subir los tipos. Ha quedado claro que el BCE sigue preocupado por la dinámica de la inflación interna. Por lo tanto, mantenemos nuestra opinión de una última subida de 25 puntos básicos hasta el nivel máximo del 4%, pero reconocemos que ahora se trata de una opción muy ajustada. En cualquier caso, creemos que el nivel máximo de tipos se alcanzará en el tercer trimestre y se mantendrá ahí durante aproximadamente un año", afirma.

Noticias relacionadas

contador