La inflación subió en enero dos décimas, hasta el 5,9%, frente al año anterior aunque bajó dos decimas en comparación con el mes previo. Mientras, la tasa subyacente sigue disparada, aumentando en el primer mes de 2023 hasta el 7,5%, según los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE). Y esto pese a que el precio de los alimentos moderó su repunte al 15,4% tras la aplicación de la rebaja del IVA.
De hecho, la tasa de variación anual de la inflación subyacente, es decir, el índice general sin alimentos no elaborados ni productos energéticos, aumenta cinco décimas y se coloca en el nivel más alto desde diciembre de 1986, situando su diferencia con el Índice de Precios de Consumo (IPC) general en más de un punto y medio. Es la mayor diferencia registrada desde mayo de 2020.
Además, la inflación general rompe así con cinco meses consecutivos de descensos en su tasa interanual. Sin embargo, hay que señalar que la inflación interanual sería del 6,5% en enero sin tener en cuenta las últimas variaciones de impuestos.
Los grupos que destacan por su influencia en el aumento de la inflación general anual son el vestido y calzado, el transporte y las comunicaciones. En cuanto al vestido y calzado, los precios suben un 3,6%, casi dos puntos superior al mes anterior. Esta evolución se debe a los precios de todos sus componentes descienden este mes menos que en enero de 2022.
El transporte sitúa su tasa en el 5,6%, más de dos puntos superior a la del mes pasado, a causa de la subida de los precios de carburantes y lubricantes, mayor que en enero del año anterior. Por su parte, las comunicaciones, cuya variación se sitúa en el 2,3%, más de cuatro puntos por encima de la registrada en diciembre, es debido a que los servicios de telefonía suben más que en enero de 2022.
Por el contrario, entre los grupos con influencia negativa destacan la vivienda y el ocio. Respecto a la vivienda, disminuye su variación casi cuatro puntos, hasta el -8,4%. Destaca en este comportamiento la bajada de la electricidad, mayor que en enero del año pasado. En ocio y cultura, la variación anual es del 2,5%, más de un punto por debajo de la registrada en diciembre, que se debe a la bajada de los precios de los paquetes turísticos, mayor que la registrada en enero de 2022.
Por CCAA, la tasa anual del IPC aumenta en enero respecto a diciembre en todas ellas excepto en Aragón, donde desciende una décima. Los mayores aumentos se producen en Canarias, con una subida de 0,5 puntos, y en Cantabria, La Rioja y Comunidad de Madrid, con incrementos de 0,4 puntos en cada una.
Por otro lado, el Índice de Precios de Consumo Armonizado (IPCA) en enero se sitúa en el 5,9%, cuatro décimas por encima del registrado el mes anterior. El Índice de Precios de Consumo a Impuestos Constantes (IPC-IC) se coloca en el 6,5%, seis décimas por encima de la registrada por el IPC general. Por su parte, el IPCA a Impuestos Constantes (IPCA-IC) presenta una tasa anual del 6,4%, cinco décimas más que la del IPCA.
