El índice de clima empresarial de Alemania volvió a empeorar en septiembre, cayendo a 85,7 desde los 85,8 puntos desestacionalizados en agosto. "Las empresas volvieron a estar menos satisfechas con el negocio actual", señalan desde Instituto de Investigación Económica (Ifo), donde creen que "el ánimo en la economía alemana sigue siendo malo".
Supone la quinta caída consecutiva de la confianza empresarial alemana y su peor lectura desde agosto de 2022. Además, el pesimismo para los próximos meses disminuyó ligeramente. "La economía alemana parece haber tocado fondo", añaden.
Por su parte, la evaluación económica actual también descendió, desde 89 a 88,7. El peor nivel desde el verano de 2020 y su sexta lectura a la baja consecutiva. Mientras, el índice de expectativas para los próximos seis meses mejoró ligeramente, desde 82,6 hasta 82,9 puntos, pero siguen en mínimos de noviembre de 2022.
Sin embargo, Alemania "aún no está fuera de peligro", ya que el sentimiento entre los directivos "sigue siendo sombrío", ha expresado el presidente del Ifo, Clemens Fuest.
Por sectores, el índice de clima empresarial aumentó ligeramente en el manufacturero. En particular, las empresas se mostraron algo más satisfechas con la situación empresarial actual, pero las expectativas se han revisado ligeramente a la baja y siguen caracterizándose por el pesimismo. Aunque la cartera de pedidos siguió disminuyendo, ya no es tan sólida como antes.
En el sector servicios, la confianza empresarial cayó por sexta vez consecutiva debido a un notable deterioro de la situación actual. Las ventas evolucionaron más débilmente que en meses anteriores. Sin embargo, las expectativas aumentaron ligeramente, aunque todavía se caracterizan por el escepticismo.
El índice subió en las operaciones por las expectativas menos pesimistas. Sin embargo, los comerciantes estaban menos satisfechos con el negocio actual. En el sector de la construcción, el indicador del clima empresarial ha caído a su valor más bajo desde enero de 2009. Las empresas valoraron aún peor su actual situación empresarial y las perspectivas para los próximos meses también siguen siendo extremadamente pesimistas.
Para los analistas de ING, los datos del Ifo "parecen ser otro reflejo del actual estancamiento de la economía alemana". "Esta es una de las lecturas del índice Ifo más débiles de los últimos cinco años. Si bien el componente de evaluación actual continuó su reciente tendencia a la baja, las expectativas mejoraron algo". "Lamentablemente, el índice Ifo es solo una confirmación y muestra que no estamos ni cerca de un punto de inflexión", opinan.
Desde Pantheon Macroeconomics consideran que un aumento en las expectativas suele ser una buena señal en esta encuesta, "pero es demasiado pronto para celebrarlo. El mensaje general del IFO sigue siendo que se avecinan tiempos difíciles para la economía alemana".
