Robert Holzmann, gobernador del Banco Nacional de Austria (OeNB), ha asegurado este lunes que no anticipa ningún recorte en los tipos de interés a lo largo de este año, una visión que choca con la del mercado, que anticipa para este curso el inicio de la flexibilización monetaria por parte del Banco Central Europeo (BCE).
"No puedo imaginar que vayamos a hablar todavía de recortes, porque no deberíamos hablar de eso. Todo lo que hemos visto en las últimas semanas apunta en la dirección opuesta, por lo que es posible que ni siquiera prevea ningún recorte este año", ha asegurado en declaraciones a 'CBNC'.
De esta manera, Holzmann, quien estos días ha participado en el Foro de Davos, enfría las aspiraciones del mercado, que descontaba la llegada de los primeros recortes de tipos en abril. "Me temo que, al abandonar Davos, esa gente quedará profundamente decepcionada", ha agregado.
La llegada de los recortes de tipos, tanto en Europa como en Estados Unidos, se antoja como uno de los principales catalizadores de los mercados este año. Sobre la fecha exacta de su inicio, la presidenta del Banco Central Europeo (BCE), Christine Lagarde, aseguró que dependerá de cómo evolucione la inflación.
"Si ganamos la batalla de la inflación, los tipos van a empezar a bajar", aseguró la semana pasada Lagarde en una entrevista al canal francés de televisión France 2.
Esta visión es similar a la que mantiene Holzmann, quien también liga cualquier recorte de tipos a la certeza de que la inflación se dirige a la meta fijada por el organismo del 2% interanual.
"A menos que veamos una caída clara hacia el 2%, no podremos hacer ningún anuncio sobre cuándo vamos a recortar", ha valorado.
Según los últimos datos, la inflación de la eurozona repuntó al 2,9% en diciembre de 2023, 5 décimas porcentuales por encima del 2,4% registrado el anterior mes de noviembre.
"Los precios pueden aumentar día a día, pero también puede correr el riesgo de cambiar la forma en que hacemos negocios, cambios estructurales, que llevan más tiempo, pero que también conllevan el peligro de cambios de precios en el futuro. Si ambas cosas se unen, nuestras perspectivas actuales de diciembre se deteriorarán y hará falta mucho más tiempo para hacer bajar los precios", ha concluido.