- Pide mayor igualdad entre hombres y mujeres en las instituciones europeas... y en el Banco de España
Luis de Guindos ha acudido este martes a su última reunión de los ministros de Economía y Finanzas de la Unión Europea (Ecofin). El titular de Economía español ha sido elegido para ocupar la vicepresidencia del Banco Central Europeo (BCE) a partir del 1 de junio, por lo que sus días como ministro del Gobierno de Mariano Rajoy están contados. Desde Bruselas, Guindos ha asegurado que su sucesor, del que dice que no sabe si será hombre o mujer, se va a encontrar un entorno económico mucho más favorable que aquel con el que ha tenido que lidiar él durante estos años.
Guindos, sobre su sucesor: "Estoy convencido de que la persona elegida conocerá bien el entorno comunitario y cómo funciona"
"Mi sucesor no se va a encontrar con ninguna Troika en ningún país", ha destacado Guindos en la rueda de prensa que ha ofrecido tras la reunión del Ecofin, que también ha dado visto bueno para que el ministro español coja las riendas de la vicepresidencia del banco central una vez acabe el mandato del portugués Vítor Constancio. Pero no ha sido esa la única referencia al camino más despejado que se va a encontrar la persona que asuma la cartera de Economía una vez formalice su decisión, algo que hará en los próximos días, aunque Guindos no ha querido concretar la fecha.
De hecho, el todavía ministro ha presumido de la mejor situación en la que se encuentra España, aunque ha reconocido que su sucesor tendrá trabajo por delante. "Soy plenamente consciente de que a pesar del esfuerzo todavía hay problemas que podrían reabrir las heridas", ha dicho Guindos, refiriéndose expresamente a la elevada tasa de paro, de más del 16%, y de los elevados niveles de deuda pública, que está en el 98,1% del PIB. "¿Somos más resistentes? Sí, pero otra cosa es que no esté todo hecho", ha insistido.
Su dimisión llegará en los próximos días, aunque ha señalado que primero quiere hablar con el presidente del Gobierno porque "tiene que hacer un ajuste". "No sé ni quién me va a sustituir, ni me ha pedido asesoramiento", ha confirmado Guindos, que ha dicho que Rajoy "sabe perfectamente cuáles son los requisitos" que debe cumplir el nuevo ministro de Economía y que "hará la elección correcta, como siempre". Eso sí, ha aprovechado para darle un consejo, sea quien sea: "Le diría que entienda los planteamientos en Bruselas, donde las decisiones se toman por consenso, que vivimos un momento que no es malo y hay que aprovecharlo. Estoy convencido de que la persona elegida conocerá bien el entorno comunitario y cómo funciona", ha adelantado Guindos.
Asimismo, el ministro ha asegurado que "no ha habido contrapartidas" para su elección para la vicepresidencia del BCE, que responde a la necesidad de que España recuperase la posición perdida en las instituciones europeas. "Para mi fue un trauma la pérdida de esa posición en el año 2012. Volver al BCE era la prioridad de España", ha reconocido Guindos, que ha afirmado que su nombramiento es un "paso importante", aunque cree que nuestro país debe tener "mucho más peso" en Europa.
Y ha remarcado que pese a ser un hombre el que se llevará el cargo de vicepresidente, pese a que el Parlamento Europeo había reclamado candidatas femeninas -que no llegaron a presentarse, dado que la terna era cosa de dos hasta que este lunes el rival de Guindos, el irlandés Philip Lane, se retiró-, él defiende la "igualdad de género". "Eso se tiene que concretar en decisiones en los próximos meses. Van a quedar vacantes cuatro puestos en el BCE, todos hombres, y es importante que se fomente la igualdad de género", ha señalado. "Hay que favorecer la igualdad de género, no sólo en el BCE, en muchos otros sitios, en Banco de España por ejemplo", ha insistido.
NORMALIZACIÓN DE LA POLÍTICA MONETARIA
Guindos ha aprovechado esta comparecencia para empezar a 'ejercer' de cara a su nuevo cargo. Aunque no ha querido hacer comentarios expresos sobre la política monetaria del BCE, sí que ha dejado claro que "hay recuperación económica en Europa" y que el mandato del banco central es lograr que la inflación se sitúe por debajo, pero próxima, al 2%. "Las medidas extraordinarias eran para tiempos extraordinarios y en circunstancias extraordinarias", ha indicado el ministro, que ha señalado que "si conseguimos esos niveles de inflación, eso implicará que los tipos de interés nominales van a estar bajos", y eso puede significar que "las medidas no convencionales dejen de ser no tan convencionales, y empiecen a ser más usuales", dando a entender que la normalización de la política monetaria llegará dentro de poco.
"Hay que valorar un conjunto de cuestiones, pero "la normalización debe ir acompasada con la recuperación económica", ha señalado también Guindos, que ha dicho que "existen algunos precedentes en los que se tomaron decisiones desde el punto de vista de los tipos de interés que no fueron congruentes con el momento económico, pero la recuperación en Europa ahora es más sólida. El BCE volverá a acertar", ha augurado.