- Hay suministro de productos básicos aunque algunos como la carne se compran al extranjero
- Mientras el comercio ha caído en torno a un 70%, las ventas de alimentación y gasolina se han elevado un 20%
- Las pymes tienen más dificultades
En Grecia hay cantidades inéditas de efectivo circulando por las calles del país y hay algunas anomalías en cuanto a la distribución de los productos. Al parecer, estas son las dos consecuencias más notables desde el cierre de los bancos griegos que llevan ya catorce días en esta situación.
El País ha informado que, según fuentes bancarias los griegos retiran a diario entre 80 y 100 millones de euros, pese al límite de 60 euros por persona que se encuentra establecido en los cajeros por persona y 120 euros por semana a los jubilados. Así, se ha disparado la circulación de efectivo en el país.
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Después de 14 días de corralito bancario, el medio informa que muchos negocios y comercios, fundamentalmente las pymes, ya usan únicamente el dinero en efectivo para prestar sus servicios. De esta manera, son varios los ejemplos que podemos encontrarnos en las calles griegas sobre esta tendencia.
Al parecer, una de las excepciones al control de capital griego es el pago a proveedores extranjeros para importar productos básicos como medicamentos o alimentos, pero cabe destacar que desde la Federación de Empresas de Grecia se quejan de que el procedimiento para que un comité del Ministerio de Finanzas autorice qué transacciones van al exterior es “ineficiente y tedioso”.
Una dueña de una farmacia de Atenas asegura que ha limitado la venta al pago en efectivo para los productos excepto para los que son muy caros, que sí acepta dinero de plástico. “Claro que podríamos seguir aceptando tarjetas, pero mientras los bancos sigan cerrados no podemos disponer del dinero para pagar a proveedores, así que cobro y pago en efectivo”, ha subrayado.
El medio cuenta también que no hay que alarmarse por el resto de productos porque hay cantidades suficientes. El café, uno de los productos que más importan los griegos del extranjero, no escasea por lo que el corralito no ha impedido realizar pagos exteriores. Un regente de una franquicia cafetera comenta: “La empresa matriz nos ha dicho que tenemos reservas para tres o cuatro meses”.
Un sector de productos que, según ha publicado El País, escasea, es el de los embalajes como los plásticos y poliestirenos, que está obligando a importar de fuera y dificulta la venta de ciertos productos como los de alimentación, por ejemplo.
Según informa la representante de supermercados, la única escasez de suministros se ha debido a alimentos frescos cuya importación debe hacerse a diario, como la carne que importa de Holanda. “Aparte de este producto, no hemos tenido mayores problemas, porque nuestros niveles de stock son altos”, dice.
Es importante señalar que, mientras el comercio ha caído en torno a un 70%, las ventas de alimentación y gasolina han experimentado un crecimiento del 20%. Los problemas son mayores en las Pymes debido a que su suministro llega del exterior y algunas grandes compañías no están teniendo muchos problemas porque se anticiparon a la situación y al periodo de incertidumbre.
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