- La capitalización total a duras penas supera el medio billón de dólares y pierde 75.000 millones en un día
Una de las firmas de inversión que se había mantenido más ecuánime en torno a la fiebre por las monedas digitales en 2017, se ha unido al coro de los bajistas este 2018. En una reciente nota para clientes, Goldman Sachs ha pasado de su anterior estado de “vigilancia” a lanzar una dura advertencia contra el tremendo auge experimentado por el bitcoin o el ethereum, que se mantienen un 900% y un 11.000% por encima de sus precios de hace un año, respectivamente.
La compañía presidida por Lloyd C. Blankfein ha escrito que ya “no hay duda" de que el ascenso astronómico de la criptomoneda durante el año pasado "la ha empujado al territorio de la burbuja".
La firma agrega que el "aumento meteórico en bitcoin en poco tiempo ha eclipsado el visto durante la burbuja de las 'puntocom'". Por si esto fuera poco, se ha unido a otros primeras espadas como Jamie Dimon, CEO de JP Morgan y ha advertido que “también creemos que las criptomonedas se han movido más allá de los niveles de burbuja en los mercados bursátiles, e incluso más allá de los niveles observados durante la 'tulipanmanía' holandesa entre 1634 y principios de 1637”.
La capitalización total a duras penas supera el medio billón de dólares y pierde 75.000 millones en un día
Pero el caso del ether es mucho más dramático. Cuando se compara el “alucinante” incremento de este activo criptográfico al de los ocurridos en cualquiera de las burbujas citadas anteriormente, estas simplemente desaparecen. El precio de esta moneda virtual apenas superaba los ocho dólares hace un año y ha llegado a marcar un hito en este 2018 en los 1.390 dólares.
En resumidas cuentas, los analistas Sharmin Mossavar-Rahmani y Brett Nelson, que firman esta nota aseguran que, aunque no dudan que el bitcoin pueda llegar a triplicar su precio, no creen que “mantenga su valor a largo plazo en su forma actual”.
COREA DEL SUR POR FIN MUEVE FICHA
Aunque el pesimismo rezuma en la nota para clientes de Goldman Sachs, la firma ha creado una rama de inversión específicamente para criptoactivos. Y sus expertos seguro que estarán muy alerta ante la avalancha regulatoria que se cierne sobre estos activos.
Además de movimientos en la Unión Europea y en EEUU, que parecen enfocados a acabar con el blanqueo de capitales y combatir la financiación del crimen a través de las plataformas de intercambio, los inversores se han mantenido en vilo ante las noticias que llegaban desde Corea del Sur.
La falta de claridad de Seúl inició un movimiento correctivo en las monedas digitales durante la semana pasada, que derivó en un crash del mercado y borró más de 360.000 millones de dólares de su capitalización de un plumazo. Este martes, el bitcoin experimenta caídas de un 10% y mantiene los 10.000 dólares, mientras el ether aguanta en los 950 dólares, después de que el Gobierno surcoreano haya anunciado que prohibirá el uso de cuentas anónimas a los operadores en monedas digitales.
A partir del 30 de enero, los inversores no podrán realizar depósitos en sus billeteras virtuales a menos que los nombres en sus cuentas bancarias coincidan con el nombre de la cuenta en los intercambios de criptomonedas, ha explicado Kim Yong-beom, vicepresidente de la Comisión de Servicios Financieros durante una conferencia de prensa en Seúl.
El Gobierno, no obstante, no ha descartado completamente echar el cierre de las plataformas donde se puede operar con criptomonedas y aún considera esta opción, ha aclarado Kim Yong-beom.
