El Gobierno ha aprobado este viernes en la reunión del Consejo de Ministros el techo de gasto para 2019. En concreto, tal y como ha anunciado la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, el límite de gasto no financiero se ha elevado a 125.064 millones de euros, lo que supone que el techo de gasto se incrementa un 4,4% respecto a 2018, cuando fue de 119.834 millones. Este es el primer paso para la elaboración de los Presupuestos Generales del Estado (PGE).
Montero ha explicado en la rueda de prensa posterior a la reunión del Ejecutivo que se ha incrementado el techo de gasto "con el objetivo de facilitar la elaboración de un presupuesto expansivo que garantice la recuperación económica justa". También ha recordado que el Congreso de los Diputados y el Senado "sólo se votan los objetivos de estabilidad, no el techo de gasto", y que si no saliese adelante "las administraciones perjudicadas serían las comunidades autónomas y la Seguridad Social, que perderían 5.000 millones de euros para pensiones, sanidad o educación".
Monterio avisa al PP: si no sale adelante "las administraciones perjudicadas serán las comunidades autónomas y la Seguridad Social, que perderían 5.000 millones"
Se trata de un claro mensaje al PP, que ya ha amenazado con tumbar el texto en las Cortes. "Sería difícil por parte del PP explicar por qué se veta lo que nos permiten desde Bruselas", ha dicho Montero en referencia a la senda de estabilidad que ha elaborado el Gobierno, y que según ha dicho "permite más flexibilización" y tener que acometer "menos ajustes".
"Si no se aprueba se volvería a lo anterior, a la senda anterior, pese a que Europa permite este aumento", lo que conllevaría más ajustes. Y es que, ha recordado, "no hay posibilidad de que las Cámaras propusieran nada, es el Gobierno el que debe diseñarlo. Sin embargo, Montero se ha mostrado confiada en que el "diálogo" y la "sensatez" prevalecerán, "salvo que el PP lo haga por una cuestión ideológica". De otra forma, ha señalado, "no tendría sentido" que un partido no permitiese que se transite por una senda más cómoda.
La ministra de Hacienda ha aprovechado también para señalar que la Comisión Europea ha constatado que los presupuestos del anterior Ejecutivo "incumplían las reglas fiscales". "Avisaron de que la senda de estabilidad del anterior Gobierno no era creíble", y por eso el gabinete de Pedro Sánchez se ha impuesto "una meta de déficit del 1,8% para el año que viene, medio punto más", que se repartirá de la siguiente forma: la administración central sólo ganará 1 décima, mientras que el resto se distribuirá por igual entre la Seguridad Social (40%) y las CCAA (el otro 40%). "El grueso se destina a política social y Estado de bienestar", ha insistido Montero.
NUEVOS OBJETIVOS DE DÉFICIT
Asimismo, el Consejo de Ministros ha aprobado la ampliación del objetivo de déficit. Se trata, según la titular de Hacienda, de dar "mayor margen fiscal para sentar las bases de unos Presupuestos expansivos, para que la recuperación sea más justa". Según ha explicado, en 2019 habrá 6.000 millones más disponibles para gastar, y de los que se beneficiarán "principalmente las clases trabajadoras".
Para 2019 se prevé un déficit del 1,8% del Producto Interior Bruto (PIB), mientras que para 2020 se espera que sea del 1,1% y ya para 2021, del 0,4%. Y en cuanto a la deuda pública, el Ejecutivo estima que en 2019 se quedará en el 96,1% del PIB, mientras que en 2020 bajará al 94,1% y en 2021 se quedará en el 91,5%.
