El presidente de la CEOE, Antonio Garamendi, ha advertido este miércoles de que muchos pequeños negocios no levantarán la persiana cuando el plan de desescalada se lo permita porque no les resultará rentable, por lo que ha insistido en la necesidad de mantener los expedientes de regulación temporal de empleo (ERTE) para evitar que la gente vaya al paro en lugar de volver a su trabajo.
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Los economistas piden al Gobierno que se pueda despedir antes de 6 meses en los ERTEGaramendi, en declaraciones a la cadena SER recogidas por Europa Press, ha señalado que, aunque es una "buena noticia" que se empiece a tener un calendario para que el país vuelva a arrancar, es necesario que el plan presentado ayer por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, vaya acompañado de medidas complementarias que ayuden a recuperarse a los sectores económicos con más dificultades.
En este sentido, el dirigente empresarial, que se enteró ayer mismo del plan de desescalada, ha reconocido que el comercio y la hostelería "están despistados, por no decir enfadados" porque ven difícil que un bar o una terraza pueda abrir al 30% "mientras no se haya solucionado cómo van a funcionar los ERTE".
"No pueden abrir con todo el personal en activo cuando van a tener realmente una disposición del 30%, en el caso de que pudieran facturar. Va a haber que complementarlo con estos ERTE, y en función de una cosa a otra, veremos si tiene sentido, porque si no muchas de esas tiendas pequeñitas no van a abrir", ha explicado.
Garamendi ha recordado que hay más de 4,5 millones de trabajadores en ERTE y 1,5 millones de autónomos en baja actividad y lo que hay que hacer es, respetando las indicaciones de Sanidad, analizar cómo se pueden reincorporar lo antes posible a la actividad para que la economía vuelva a funcionar. "Si no se hace de manera adecuada tenemos el riesgo es que mucha gente, en vez de volver al trabajo, vaya al paro, y eso no lo queremos nadie", ha advertido.
Así, piensa que es inevitable prorrogar algunos ERTE, como los ligados al sector turístico o a ciertas industrias, como la automoción. "Tener un hotel abierto al 20% no es rentable, es que puede compensar no abrirlo (...) Hasta que no se vuelva a recuperar este mercado (el del turismo) es muy difícil que se recuperen el comercio, la hostelería... y, por tanto, hay que jugar con los ERTE".
En el caso del automóvil, Garamendi ha indicado que ahora mismo la automoción está al 20% de su producción, con los concesionarios cerrados. Por lo tanto, hasta que estos no estén "a pleno rendimiento" hay que proteger a esta industria como a sus trabajadores para evitar la quiebra de estas empresas. "Para eso están los ERTE, por eso hay que ver cómo, de forma progresiva, se incorpora cada día más gente al trabajo", ha subrayado.