El Fondo Monetario Internacional (FMI) alerta este miércoles sobre la puesta en marcha de medidas o políticas de austeridad fiscal en la zona euro. En su opinión, "podrían debilitar la recuperación" del bloque, según se desprende en su revisión anual de la economía de la eurozona, conocida como 'Artículo IV'.
El FMI publicó las conclusiones de su informe a finales de noviembre, aunque es ahora cuando ha finalizado el documento completo. "Proporcionar apoyo fiscal insuficiente, los retrasos en la implementación del paquete de recuperación europeo o retirar el apoyo demasiado pronto podría debilitar la recuperación", ha alertado el organismo dirigido por Kristalina Georgieva.
Es "extremadamente desafiante" encontrar un equilibrio entre las medidas dirigidas a contener la pandemia y las destinadas a apoyar la recuperación, piensa el fondo. Aunque, la "robustez" del repunte económico dependerá "críticamente" de encontrar el equilibrio, mitigando el daño económico de las medidas de contención a corto plazo, al tiempo que se facilita la reestructuración y reasignación de recursos entre sectores y regiones.
Aún con el optimismo por las vacunas, el fondo ha indicado que los pronósticos siguen sujetos a una "incertidumbre extrema" y que los riesgos permanecen alineados a la baja. Consideran que la recuperación será más suave que la prevista anteriormente. En octubre, el organismo estimó que el producto interior bruto (PIB) del conjunto de la eurozona caería un 8,3% en 2020 y repuntaría un 5,2% y un 3,1% en 2021 y 2022, respectivamente.
POLÍTICAS FISCALES NACIONALES
El Fondo ha indicado que el repunte de la pandemia a finales de este año ha provocado que las políticas fiscales nacionales tengan que ofrecer apoyo durante más tiempo del que se había previsto inicialmente. "Se debería proporcionar apoyo fiscal continuo a los hogares afectados por la crisis y también a empresas que sean viables cuando cese la pandemia, incluyendo esquemas de reducción de empleo, liquidez, apoyo al capital de las empresas y recortes temporales de impuestos o retrasos en el pago de tributos", han indicado.
Los países "no deberían retirar el apoyo fiscal demasiado rápido" pese a que existan presiones para ello, especialmente en los más endeudados, insisten. El ente con sede en Washington ha alertado de que, si los pronósticos se deterioran mucho, sería necesario un apoyo fiscal "aún más grande". "En los países con niveles de deuda altos, proporcionar el apoyo fiscal necesario [...] podría llevar a una reacción adversa de los mercados, con potenciales efectos colaterales en los bancos cuya exposición soberana se haya incrementado significativamente desde el comienzo de la crisis", ha apostillado. En este caso, sería necesario que la UE aprobara un nuevo paquete de ayuda.