La agencia de calificación Fitch ha rebajado en dos décimas su previsión de crecimiento para España para el año 2019, hasta el 2,1% desde el 2,3% que pronosticaba el pasado mes de junio, según refleja en su último informe de perspectivas globales.
Fitch destaca que la inversión en bienes de capital en el país se ha moderado en los últimos meses, tras registrar una "fuerte evolución" en 2018, sobre todo la de maquinaria, que se ha reducido "notablemente", especialmente en el transporte.
No obstante, destaca que la inversión residencial ha mantenido su expansión, con los permisos de construcción "incrementándose de forma gradual", por lo que, pese al cambio efectuado para este año, la agencia ha mantenido en el 1,7% su previsión de crecimiento el PIB español para 2020 e incrementado al 1,8% el de 2021 (desde el 1,6% anterior).
Fitch también resalta que el consumo sigue apoyándose "en las altas tasas de creación de empleo, en el crecimiento de los salarios, sobre todo a partir del último incremento del salario mínimo", lo que le lleva a esperar un comportamiento "resiliente" de la economía.
La agencia de calificación también se refiere a la "incertidumbre política" desatada por la nueva convocatoria de elecciones para el próximo 10 de noviembre y a la "baja tasa de ahorro" como principales obstáculos para el auge de demanda.