- Sin embargo, Fitch no espera una mejora de la posición fiscal ni este año ni el próximo
La calificadora de riesgos Fitch ha decidido mantener el rating de la deuda soberana española en BBB+ con perspectiva estable. La agencia destaca el crecimiento de la economía, pero no espera una mejoría de la posición fiscal durante este año y el próximo.
La ronda de revisiones del rating de la deuda soberana española termina con la decisión de Fitch de mantener la calificación crediticia en BBB+ con perspectiva estable. Como Moody's, no aplica cambios. No obstante, Fitch ya tenía una nota para la deuda española igual a la que otorga actualmente S&P, después de que hace dos semanas elevara la calificación desde BBB hasta BBB+.
RECUPERACIÓN SÓLIDA
Fitch eleva su previsión de crecimiento para España hasta el 3,1% en 2015, un 2,5% en 2016 y un 2,2% en 2017
Fitch destaca el crecimiento de la economía española, con una "fuerte recuperación" más rápida que el resto de países de la zona euro. De hecho, la calificadora de riesgos eleva su previsión de crecimiento para España hasta el 3,1% en 2015, un 2,5% en 2016 y un 2,2% en 2017. "La recuperación está impulsada principalmente por la demanda", indican los analistas de la agencia.
A pesar de esta recuperación, el PIB sigue cuatro puntos porcentuales por debajo de los niveles previos a la crisis, "debido a la recesión profunda y prolongada durante el periodo entre 2009 y 2013. "Fitch mantiene su estimación de crecimiento potencial en torno al 1,5% a medio plazo", aunque destaca las reformas estructurales de los últimos años.
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INCERTIDUMBRE FISCAL
El crecimiento más fuerte de lo esperado y los bajos tipos de interés "están teniendo un impacto favorable en el equilibrio presupuestario". Así, la agencia espera una mejora en el déficit presupuestario hasta el 4,3% en 2015 frente al 5,8% en 2014, "aunque sería el déficit más grande de la zona euro, antes de disminuir hasta el 3,1% en 2016".
Sin embargo, para Fitch esta mejoría es cíclica. De hecho, la agencia no espera ninguna mejora "en la posición fiscal estructural subyacente entre 2014 y 2016". Si las perspectivas de crecimiento mejoran a corto plazo, implicarían una mejora cíclica del déficit y que no fueran necesarios nuevos ajustes para cumplir con los objetivos fiscales de la Unión Europea. Asimismo, "el resultado de las elecciones en diciembre también crea incertidumbre sobre la política fiscal".
DEUDA PÚBLICA ESTABILIZADA
La deuda pública está a punto de estabilizarse, aunque a un nivel alto
"La deuda pública está a punto de estabilizarse, aunque a un nivel alto", expone el comunicado. Los analistas de Fitch esperan que la deuda pública bruta en relación con el PIB alcance un pico del 99% en 2015, muy superior al 36% de 2017 y a la mediana de los países con calificación de BBB. La ratio deuda/PIB se reducirá hasta el 90% en 2024, según el escenario base de la agencia.
A pesar de ello, "las condiciones favorables han prevalecido desde la revisión anterior" en cuanto a la rentabilidad de los bonos, que sigue en torno al 2% en el mercado secundario. Mientras que el rendimiento a corto plazo ha estado cerca del 2%.
TENSIÓN CON CATALUÑA
Fitch también analiza el escenario que vive Cataluña. "La demanda de una mayor autonomía" de la región "por una proporción significativa de la población ha aumentado las tensiones entre los Gobiernos central y autonómico".
"Aunque el resultado de las elecciones autonómicas catalanas en septiembre parece haber reducido el riesgo de una crisis constitucional en el corto plazo, las tensiones es probable que persistan", en opinión de Fitch. "Será un reto llegar a un acuerdo sobre la autonomía regional que sea mutuamente aceptable para el gobierno central, Cataluña y otras regiones españolas", añade la agencia.
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