- Muestra su satisfacción con el crecimiento económico y no observa presiones inflacionistas
La Reserva Federal de EEUU (Fed) ha alertado sobre los riesgos crecientes que el proteccionismo económico de la Administración Trump tiene sobre el crecimiento de Estados Unidos.
Según han mostrado las actas de su última reunión, celebrada el pasado mes de junio, los miembros del banco central expresaron su preocupación sobre la incertidumbre y los riesgos asociados a la política comercial estadounidense.
"La mayoría" de los miembros de la Fed "alertaron de que la incertidumbre y los riesgos asociados asociados con la política comercial se han intensificado", lo que ha aumentado su "preocupación" de que esa incertidumbre y esos riesgos "eventualmente puedan tener efectos negativos sobre el sentimiento empresarial y las inversiones".
En este sentido, la Fed también percibe "riesgos potenciales a la baja" para "el crecimiento económico y la inflación asociados con los acontecimientos políticos en Europa y en algunos mercados emergentes".
Sobre los estímulos fiscales aplicados por la Administración Trump, la Fed considera que pueden aumentar el ritmo de crecimiento, pero al mismo tiempo algunos de sus miembros consideran que "la política fiscal no está en una senda sostenible".
En lo que respecta a la política monetaria y la gradual subida de los intereses emprendida por la Fed en los últimos años para impulsar la inflación y evitar el recalentamiento económico y la formación de burbujas financieras, las actas muestran que hay consenso sobre la necesidad de seguir subiendo los tipos de interés "de manera gradual".
Su previsión es que los intereses alcancen su tasa neutral sobre la economía en "algún momento de 2019". Por el momento, la Fed no observa presiones inflacionistas adicionales. Incluso alguno de sus miembros considera que un repunte de los precios por encima del 2% "de manera temporal" como el que está sucediendo en 2018 será positivo para elevar las expectativas de inflación a largo plazo hasta su objetivo del 2%.
Para Ian Shepherdson, experto de Pantheon Macroeconomics, las actas muestran una Fed "satisfecha con el ritmo de crecimiento económico y la falta de presiones inflacionistas inmediatas, aunque observa riesgos por ambos lados". En su opinión, el banco central está "todavía dividido a la hora de mostrar una posición más dura (hawkish)".
Para Shepherdson, no será hasta el mes de diciembre cuando la Fed se verá obligada a endurecer su política monetaria, debido a que la tasa de paro bajará hasta el 3,5% y los salarios "comenzarán a repuntar de manera apreciable".
Según los expertos de Berenberg, la Fed no ha logrado transmitir al mercado realmente su posible reacción si las condiciones y expectativas para las perspectivas se desvían materialmente de previsiones, por lo que "corre el riesgo de sacudir a los mercados financieros y a la economía". En su opinión, "la Fed esté dando demasiada probabilidad a una evolución perfectamente uniforme de las condiciones económicas y de inflación".