- El Gobierno apunta a que las eléctricas son las culpables de la subida
- Facua alerta de que la culpabilidad se reparte a partes iguales entre políticos y empresas del sector
- Las facturas que llegan a casa suelen ser complejas de entender
Como si de una guerra a tres bandas se tratase, el fuego cruzado por el precio de la luz en España es incesante. Gobierno y empresas eléctricas se tiran los trastos a la cabeza para explicar la situación mientras que los organismos de los consumidores apunta a las instituciones públicas y facturadoras para pedir explicaciones.
A final de mes las cuentas bancarias de los españoles sufren un fuerte revés, y casi siempre, por la misma culpable: la factura de la luz. Este 2016, a pesar de que ha habido meses en los que el precio del kilovatio ha descendido en algunos tramos del año, se llevan siete meses de subida consecutiva. Según la CNMC, la luz se ha elevado un 38% desde que comenzó la crisis en 2008 y un 83% si se cogen las cifras de los últimos diez años. La factura de la luz subía en noviembre (2,3%), si bien acumula una bajada del 0,3% en lo que llevamos de año respecto al mismo período de 2015.
Las facturaciones pueden estar fijadas por el Gobierno o bien por el libre comercio
Aunque desde el sector eléctrico indican otra cosa y apuestan por mostrar los datos positivos. Endesa asegura que los datos son mejores con respecto al año pasado. “A pesar de esos siete meses de subida, el precio mayorista a día de hoy todavía está por debajo de los precios de junio o julio de 2015. El precio mayorista medio en lo que llevamos de 2016 está un 12,5% por debajo del precio medio del mismo periodo de 2015”, argumenta la empresa española. Unesa (Asociación Española de la Industria Eléctrica) también refuerza este argumento. “Con todo, lo relevante es que el precio medio de 2016 es inferior al precio medio que pagaron los consumidores en 2015”, corrobora a Bolsamanía.
CRUCE DE DECLARACIONES
Álvaro Nadal, ministro de Energía, reconocía hace escasos días la elevada carga que supone para los españoles la factura de la luz. “Los ciudadanos ya pagan demasiado. El sistema ahora mismo tiene 10.000 millones de euros en cargos que pagan la solidaridad interterritorial, una deuda que se generó y hay que amortizar”, explicaba. Cuando fue cuestionado sobresu alto precio de la misma, apuntaba a las empresas eléctricas como máximas responsables debido a la deuda que tienen y que de no ser así, según el político, “España tendría los precios más bajos de Europa”. “Cuando uno tiene una hipoteca, la tiene que pagar e intentar cambiarla para que no sea un lastre”, añadía el titular de Energía, Turismo y Agenda Digital.
La patata caliente pues, en las últimas fechas recae en las empresas eléctricas. Según palabras de Endesa para este medio, esto se debe a que “que más de la mitad de la factura eléctrica son sobrecostes, como las ayudas a las renovables, el déficit de tarifa, las compensaciones a la generación insular e impuestos, que no son responsabilidad de las empresas eléctricas".
Este cruce de declaraciones hace que las organizaciones de los consumidores como FACUA señalen a las dos partes como las principales culpables. Ángeles Castellano, portavoz de la organización recalca que “la evolución siempre sube en las épocas de mayor consumo, para el beneficio de las compañías. Todo ello, no hay duda que viene propiciado por las denominadas puertas giratorias en las eléctricas, es el binomio perfecto”. De esta manera, comenzó a establecerse el precio de la luz a partir de unas subastas trimestrales (antes anuales) donde participaban las compañías de electricidad y donde finalmente quedaba establecido el coste de la energía.
Pero, ¿quién tiene toda la razón? Tanto Gobierno como eléctricas se pasan la bomba y ninguno miente. La factura eléctrica puede tener dos tipos de cobro. Una es la del mercado, que depende del comportamiento el mismo en función de la oferta y de la demanda de energía que haya cada momento. Otra es la parte regulada, que fija el Gobierno, indican desde Unesa. “Con respecto a la primera, los valores de mercado que se cotizan para el año que viene indican el mantenimiento del precio medio de este año. En cuanto a los peajes que fija el Gobierno, la propuesta es de congelación de los mismos”, incide el organismo por lo que ambas se ciñen a los parámetros establecidos.
CON LA TARIFA POR HORAS TAMPOCO BAJAN LOS PRECIOS
Ha pasado poco más de un año cuando se oficializaba el nuevo sistema de facturación por horas. Esta nueva fórmula consiste en que el precio de la luz va variando cada hora y cada día, pudiendo ser así más caro el kilovatio un lunes que un martes a la misma hora. El precio se fija el día de antes y se publica en los canales oficiales.
El Ministerio de Energía señala a Bolsamanía que aunque de momento no se han visto los resultados "el consumidor puede aprovechar los momentos de precios bajos de la electricidad (típicamente los fines de semana o por las noches cuando hay menor demanda) para ahorrar en su factura. Es decir: poner la lavadora o el lavavajillas en las horas de precios más bajos permitirá abaratar la factura eléctrica”, señalan.
Ángeles Castellano resalta que esta medida con afán recaudatorio. “Entendemos que no tiene ayuda. Permite que se aumente el precio en los horarios que más utiliza. Es ridículo poner una lavadora o encender la estufa a las tres de la mañana, se hizo para recaudar más dinero”, apunta.
Algo que no comparte ni Ministerio ni Endesa. “Nada más lejos que eso. Se trata de facilitar al consumidor un consumo más responsable y aprovechar las horas con precios más bajos para abaratar su factura”, incide el organismo oficial. La eléctrica argumenta que fue para el beneficio del consumidor. Según Endesa, el Ministerio de Industria dio en su momento fue que el precio resultante de las subastas incorporaba una prima de riesgo (el coste de asegurar un precio fijo durante todo el trimestre, cuando el precio subyacente del mercado mayorista cambia hora a hora), y que "el traslado directo a los clientes permitía un ahorro respecto al precio resultante de las subastas (se trata de un ahorro en promedio, que no impide que parte del tiempo el precio horario esté por encima del precio a plazo que resultaba de las subastas)", puntualiza,
POR QUÉ SUBE O BAJA LA LUZ
El precio de la luz, como los españoles pueden comprobar en sus facturas no es siempre el mismo, esto se debe a diversos motivos.
El descenso de la lluvia, el viento o el cierre de otras plantas extranjeras provoca subida de precios
Uno de ellos son los famosos peajes de acceso. En este concepto se incluyen los costes en los que se incurre para que la energía llegue finalmente hasta nuestros hogares tales como costes de distribución.
Otro de ellos es el precio de la energía. Este concepto supone prácticamente la mitad del importe del recibo de la luz. Se determina trimestralmente mediante subasta. Es aquí donde principalmente se tiene la repercusión final de la subida o bajada del precio. Aquí se tienen en cuenta hasta los fenómenos atmosféricos como la lluvia o el viento, con la que se consigue la energía eléctrica.
¿QUÉ HAY QUE ENTENDER EN LAS FACTURAS?
Facua alerta de que las facturas son indescriptibles. “Es difícil entender las facturas. Las eléctricas comienzan a confundir para que se pase a una tarifa del gobierno hacia el mercado libre con precios disparatados. Es muy compleja. No quieren saber lo que estamos pagando para poder reclamar lo nuestro”, exponen. Por último, resalta que están luchando para que las facturas sean mucho más “legibles”.
Estos son los datos más importantes que debemos prestar atención en las facturas
CUPS: en España es el número de identificación del contador con 20 o 22 dígitos y empieza por ES, y viene a ser el DNI de cada contador.
Potencia contratada: cantidad de Kilovatios incluidos en el contrato. Es un valor fijo y depende de la cantidad establecida en el contrato.
Tarifa contratada: es el tipo de tarifa con la que nos van a facturar cada kWh consumido. Viene determinada en función de nuestra tensión de suministro (baja, media o alta tensión). Esta es una de las más importantes pues podemos acogernos a la TUR, a los bonos sociales, ir al libre comercio si se desea…
Contrato de acceso: la empresa distribuidora percibe por ello los peajes de acceso, que son un concepto regulado implícito en el precio de la energía. En este apartado, la factura suele engordarse.
Término de energía activa: indica el consumo de energía en kWh realizado en el periodo de lectura multiplicado por el precio unitario del término de energía por cada periodo tarifario
Penalizaciones: en el caso de que se exceda en la potencia contratada o el consumo de energía reactiva supere el 33% del consumo de energía activa, infiere en penalizaciones en la factura.
Impuesto sobre la electricidad: es el 5,1227% (1,035113 x 4,864%) aplicado sobre la base del importe total de término de potencia, término de energía y a la penalización por consumo de energía reactiva. A ello hay que sumar el IVA.
¿Y el futuro? Durante el mes de enero se volverá a subastar el precio de la energía y esto puede provocar que vuelva a subir o bajar el futuro. Además, otro de los grandes pasospara que el precio de la luz pueda bajar, es el compromiso que hizo esta semana el ministro Nadal. El titular de la cartera de Energía ha asegurado que mantendrá, e incluso bajará, el precio de los peajes a las eléctricas. Además, Endesa indica que otro de los factores para que el precio vuelva a bajar es que se reabran las plantas nucleares francesas tras los fallos detectados hace dos meses.
