"El impacto en cada economía europea del conflicto ucraniano dependerá del grado de dependencia energética". Ese es, según Oxford Economics, el mayor riesgo, dada la dependencia europea del gas ruso, que en algunos países representa todo su suministro.
Rusia ha atacado finalmente Ucrania esta madrugada y las bolsas se hunden mientras que los precios de la energía se disparan. El petróleo Brent escala por encima de los 100 dólares el barril por primera vez desde 2014.
Advierten desde Oxford Economics que la subida de precios de la energía debido al conflicto supondrá un nuevo impulso a la inflación y penalizará los ingresos reales. Esto afectará a todos los países europeos de forma similar.
"Esto provocará un aumento de la inflación y un lastre para el crecimiento, principalmente a través de la disminución de los ingresos reales de los hogares y la caída de la confianza", recalcan.
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Ucrania implanta el estado de emergencia y permite a sus ciudadanos tener armasEsta dependencia energética es el mayor foco de incertidumbre, especialmente si se tiene en cuenta que, para la mayoría de países europeos, los vínculos comerciales con Rusia son relativamente menores. "Con algunas excepciones, éstos solo representan una baja amenaza para las perspectivas", señalan estos analistas.
Del mismo modo, los vínculos financieros también son limitados. Sólo tres bancos europeos tienen presencia "notable" en Rusia y "no representan un riesgo sistémico para el sistema bancario", añaden.
Eso sí, el panorama varía mucho entre países. "Los Estados bálticos y algunos países de Europa del Este sentirán más los efectos de la crisis", advierten estos expertos.
SE CONFIRMA EL REPUNTE DE LA INFLACIÓN EN ENERO
La inflación final de enero de la eurozona confirmó este miércoles un nuevo récord, con un repunte hasta el 5,1% interanual desde el 5,0% de diciembre. El aumento persistente de los precios de la energía sigue siendo el principal motor de la tendencia al alza de la inflación, aunque se observaron notables aumentos en todos los componentes, excepto los bienes industriales no energéticos. Por su parte, la inflación subyacente final se situó en el 2,3%, 0,3 puntos menos que el mes anterior.
Oxford Economics prevé que la inflación se mantenga al alza durante más tiempo, presionada precisamente por esos precios de la energía más altos de la previsto. Así, anticipa una revisión al alza de las previsiones de inflación del Banco Central Europeo (BCE) y espera que el organismo presidido por Christine Lagarde acuerde algún endurecimiento de la política monetaria en la reunión del 10 de marzo.