La fortaleza del crecimiento económico de la zona euro en el corto plazo depende de que el sector servicios no pierda impulso. Y en esto tendrán bastante que ver aquellos países sensibles al turismo, como España y Portugal, que experimentarán algunos de los resultados más fuertes. Por el contrario, los países más expuestos a la manufactura, como Alemania e Italia, estarán por debajo del promedio de la eurozona los próximos trimestres.
Noticia relacionada
Semáforo ámbar en la eurozona: la economía persistirá estancada en el lodo a corto plazo"Nuestra evaluación sigue siendo de crecimiento mediocre en lo que resta de 2023 para la eurozona", señalan los expertos de Oxford Economics, basándose en los últimos datos macroeconómicos conocidos esta semana.
Los PMI, por ejemplo, ha mostrado lectura más baja desde principios de 2020, en el caso del sector manufacturero, mientras que en el caso del sector servicios registró una desaceleración considerable de impulso desde sus máximos de 11 meses registrados en abril.
Como destacan los analistas, el resultado de estos índices supone que la evolución del Producto Interior Bruto (PIB) a corto plazo depende de que los servicios, que representan alrededor de las tres cuartas partes de la economía de la eurozona, no pierdan impulso rápidamente. Es más, el índice sugiere que el sector puede estar debilitándose más rápidamente de lo esperado. "Los datos más recientes no son tan positivos como hace unos meses y quizás solo las actividades relacionadas con el turismo superen el rendimiento".
Y añaden: "Es cierto que todavía hay algunos focos de fortaleza en las actividades de servicios, siendo las más evidentes las actividades relacionadas con el turismo. Los datos hasta mayo para los países de la eurozona apuntan a una fuerte temporada de turismo, en medio de una demanda reprimida aún fuerte de viajes. Esto significa que veremos a países sensibles al turismo como España y Portugal experimentar algunos de los resultados más fuertes este año".
Mientras tanto, "los países más expuestos a la industria manufacturera, como Alemania e Italia, estarán por debajo del promedio de la eurozona en los próximos trimestres". Y es que las encuestas muestran que el sector industrial sigue siendo un área particular de debilidad para la eurozona.
"La producción industrial en la eurozona apenas ha crecido durante el último año con una secuencia de problemas de suministro, altos costes de energía y una disminución de la demanda global que impactó severamente al sector." Y no esperan que esto cambie notablemente.
ES PROBABLE QUE LAS DIVERGENCIAS REGIONALES PERSISTAN
Hay grandes diferencias por países y es probable que persistan a corto plazo. Así lo creen en J. Safra Sarasin Sustainable AM, donde coinciden en comentar que las economías del sur de Europa van mejor que Alemania y los Países Bajos: "Las diferencias regionales son enormes, probablemente como reflejo de una fuerte demanda de servicios turísticos en algunos países, una demanda de bienes de inversión de China inferior a la prevista en otros y unas perspectivas poco halagüeñas para sectores clave como la producción de automóviles en Alemania".
Por sectores, su opinión lleva el mismo camino. Prevén que el sector servicios seguirá creciendo en los próximos meses, mientras que los sectores de la construcción y la industria están en recesión. "Es probable que la actividad manufacturera haya disminuido en el segundo trimestre y la caída de los pedidos indica que probablemente esto no cambie en los próximos meses", mientras que tanto los índices PMI como el sentimiento económico "muestran que el sector servicios es el único que se está expandiendo en estos momentos, ya que, a pesar de mostrar cierta desaceleración, sigue siendo fuerte".
En conjunto, estiman que "todos los sectores registrarán probablemente un crecimiento muy inferior al potencial en los próximos trimestres".