España va a enfrentarse a un duro camino para lograr la recuperación económica una vez pase la crisis del coronavirus. Y no es que la economía vaya a tardar en volver a crecer, ese no será el problema, sino situarse de nuevo en los niveles previos a la pandemia. Así lo asegura la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (AIReF), que estima que uno de los mayores quebraderos de cabeza lo dará la deuda pública, que se va a disparar por el Covid-19: tardará casi 20 años en recuperar la ratio en la que estaba antes del brote.
En el Informe sobre la Actualización del Programa de Estabilidad 2020-2021, la AIReF proyecta un aumento en la ratio de deuda sobre el Producto Interior Bruto (PIB) de entre 20 y 27 puntos en 2020, de forma que suba hasta el rango del 115%-122%, y seguirá incrementándose el año que viene, al menos dos puntos, de forma que cerrará entre el 117%-124%. Y todo, debido a la "acumulación de los déficits primarios", que según el organismo que preside Cristina Herrero "será el factor que contribuirá en mayor medida a dicho incremento".
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AIReF, más negativa que el Gobierno: caída del PIB del 11,7% y déficit del 13,8%Hace unas semanas el Banco de España confirmaba que la deuda pública se situaba, a cierre de 2019, en el 95,5% del PIB, una cota que según la AIReF no volveremos a ver hasta dentro de casi dos décadas. Porque a pesar de que las perspectivas económicas actuales "están rodeadas de una incertidumbre sin precedentes, existe certidumbre sobre su elevado impacto en los niveles de deuda", apunta, y la propagación del Covid-19 "va a provocar un aumento fuerte, y en principio temporal, del déficit público que a su vez acarreará un incremento permanente en el nivel de deuda pública sobre el PIB".
En su opinión, España va a tener una "dificultad añadida" a la hora de afrontar los retos de esta crisis, de forma que para mantener estable en 2030 el nivel de deuda de 2021 "sería necesario realizar a lo largo de la próxima década un ejercicio de consolidación fiscal similar al realizado en la década pasada, y alcanzar el equilibrio presupuestario en 2030", apunta la AIReF.
Y no solo eso, ya que cree que habría que mantener el equilibrio presupuestario casi otra década para "poder digerir enteramente las consecuencias de esta crisis, y volver al nivel previo de una ratio de deuda del 95,5% del PIB en 2038".
SOLO 7 DE CADA 10 AFECTADOS POR ERTE VOLVERÁ AL TRABAJO
La AIReF se ha mostrado más negativa que el Gobierno en sus previsiones al estimar una caída del PIB del 11,7% y un déficit del 13,8% para 2020, ya que considera que el Gobierno ha inflado sus previsiones de ingresos y se ha quedado corto en las de gasto. Además, dedica también un apartado especial en el informe a los Expedientes de Regulación Temporal de Empleo (ERTE), y dice que casi una tercera parte de los trabajadores afectados no recuperarán su puesto.
Están sujetos a esta medida, que el Gobierno ha facilitado para minimizar el impacto de la crisis en el mercado laboral, unos 4 millones de trabajadores, y aunque los ERTE servirán para lograr la "recuperación de puestos de trabajo una vez se reactive la actividad económica", el organismo ve inevitable que parte de los afectados se queden por el camino.
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VÍDEO | Radiografía de los ERTE: a quiénes han afectado másAunque el Ejecutivo apruebe extender estos expedientes más allá del estado de alarma para que las empresas puedan acompasar el ritmo de reincorporación de sus trabajadores al de recuperación de la actividad en las diferentes fases de la desescalada, la AIReF estima que el porcentaje de puestos sujetos a ERTE que volverán a estar ocupados a lo largo del año "será aproximadamente un 70% a finales de 2020", condicionado a los escenarios de recuperación gradual de la actividad.
Es decir, que para finales de año, por mucho que los ERTE se extiendan (el Gobierno ya lo ha anunciado, aunque no ha dado detalles sobre ello), es probable que el 30% de los afectados vaya al paro. "Las ramas de la hostelería, la construcción, las actividades artísticas, recreativas y de entretenimiento y las actividades de los hogares como empleadores de personal doméstico serán las que sufran una destrucción más permanente de empleo", afirma la AIReF, que pide, no obstante, tomar con "cautela" esta hipótesis.