- A largo plazo, sin embargo, esa correlación entre la evolución del petróleo y las bolsas no es en absoluto tan clara
- Existe un claro enfrentamiento entre los expertos que ven en la caída del crudo algo negativo y los que opinan todo lo contrario
- Para algunos analistas, estas caídas en el crudo suponen, en esencia, una transferencia de la riqueza
Últimamente es muy habitual leer que las bolsas se desploman por las caídas en el petróleo en ese afán que tenemos los periodistas por simplificar las explicaciones, mucho más cuando se trata de dar explicaciones sobre lo que hacen o dejan de hacer los mercados.
Lo cierto es que siempre buscamos una causa, o dos... para justificar los vaivenes de la renta variable, y la verdad es que, en la mayoría de los casos, son muchos los motivos que provocan las fluctuaciones de las bolsas, mucho más complejos y difíciles de explicar de lo que pueda parecer a priori.
Responder con un "sí" rotundo a la pregunta de si se deben las caídas en bolsa a los recortes del crudo creemos que no es lo más acertado
Sin embargo, como decimos, en ese afán por que la información bursátil llegue a todo el mundo (al que sepa más pero también al que sepa menos de mercados), tendemos hacia esas simplificaciones que pueden ser erróneas y que, en todo caso, en la mayoría de las ocasiones, están lejos de ser "verdades absolutas".
Lea también: El petróleo cae un 6%: ¿Quién gana y quién pierde con el desplome de los precios?
¿ESTÁN CAYENDO LAS BOLSAS POR LOS DESCENSOS DEL CRUDO?
¿Se deben los recortes que las bolsas vienen registrando, especialmente desde principios de año, a las caídas del crudo? Tal vez esta sea la pregunta que nos debemos hacer ahora los que informamos sobre mercados. Responder con un "sí" rotundo no creemos que fuera lo más acertado.
La respuesta sería "sí y no", en el sentido de que, tal y como vemos en el gráfico comparativo del Brent y el Euro Stoxx que aparece a continuación, sí podemos hablar de correlación y paralelismo entre el comportamiento del crudo y el de las bolsas en el corto plazo (en el último año) pero no se vería esa correlación, en absoluto, en el largo plazo.
Así pues, como decimos, en el corto plazo, sí se está observando ese paralelismo. De hecho, por poner un ejemplo muy concreto, este martes el crudo subía un 4% y las bolsas subían en torno a un 2%. Este miércoles, sin embargo, el petróleo cae en torno a un 3% y las bolsas ceden en esa misma proporción (Ibex: -2,82%; Cac: -3,25%; Dax: -3,03%; Ftse: -2,87%).
Ahora bien, la siguiente pregunta que deberíamos hacernos es por qué, exactamente, una caída en el precio del crudo es mala para las bolsas, y aquí es donde vemos, claramente, que no hay consenso entre los expertos sobre el hecho de que esta caída sea realmente algo malo y perjudicial para los mercados.
Los analistas de Link Securities, por ejemplo, están entre los que creen que, efectivamente, las caídas en el crudo son algo negativo y daban hace unos días una explicación bastante clara de cuáles son esas consecuencias desfavorables que, en su opinión, son las que están descontando los inversores:
Hay opiniones claramente enfrentadas entre los analistas que ven en el caída del crudo algo perjudicial y los que opinan todo lo contrario
1) Las balanzas fiscales de los países productores están viéndose muy negativamente afectadas, limitando su capacidad de comprar productos a los países desarrollados y con el riesgo de que algunos de estos países deshagan posiciones de sus fondos soberanos, algo que parece podría estar ya ocurriendo; además, podrían aflorar importantes tensiones internas con el consiguiente riesgo geopolítico que ello conlleva en regiones como Oriente Próximo o la misma Rusia.
2) La posible quiebra en cadena de los productores de gas y petróleo de esquisto en Norteamérica, algo que ya están teniendo en cuenta los grandes bancos estadounidenses como anunciaron el viernes tanto el Citigroup como Wells Fargo, cuando presentaron sus cuentas –están empezando a dotar provisiones para cubrir futuras pérdidas por impago; este hecho ha tensionado el mercado de bonos de alto rendimiento estadounidense, en el que cerca del 20% de los mismos corresponden a empresas del sector del gas y petróleo de esquisto.
Fuera de nuestras fronteras, el reputado inversor Marc Faber, aunque concreta menos y da unas explicaciones algo más ambiguas, también ve en los recortes del precio del crudo la causa del mal comportamiento de los mercados y augura un mal año 2016, entre otras razones, por esta causa. "El principal factor (de las caídas en las bolsas) es que cada vez hay menos liquidez global debido a la disminución de los precios del petróleo", decía Faber.
PERO, ¿ES TAN MALO QUE CAIGA EL PETRÓLEO?
"La caída del precio del petróleo para las economías desarrolladas, y en concreto para España, es una gran noticia".
Esta frase aparece en un interesante artículo de José Ramón Iturriaga, gestor de los fondos de inversión Okavango Delta, Kalahari y Spanish Opportunities, y evidencia que, desde luego, no hay unanimidad entre las voces que hablan de estos recortes en el crudo como algo negativo.
"Estas caídas son una transferencia de riqueza entre los países productores y los consumidores de las economías desarrolladas. Además, constituye una buena noticia para la economía china pues es el mayor importador del mundo"
"Estas caídas son una transferencia de riqueza entre los países productores y los consumidores de las economías desarrolladas. Además, constituye una buena noticia para la economía china pues es el mayor importador del mundo", señala Iturriaga, y añade: "En los próximos días volveremos a las andadas, volverán las dudas sobre la salud de la economía mundial en una lectura un poco limitada de los movimientos de los precios de las materias primas. En el caso concreto del petróleo, en el que la corrección viene principalmente por un cambio de paradigma en la oferta, la lectura es del todo errónea".
Y es que, esa falta de liquidez global de la que habla Faber no sería, para muchos analistas, tan "global", sino más bien una "transferencia" de esa liquidez y riqueza. En este sentido, el columnista de MarketWatch, Jeff Reeves, decía esta misma semana que, en Wall Street, "cada centavo que cae en el precio del crudo es igual a un extra de 1.000 millones de dólares en ingresos discrecionales para los consumidores estadounidenses". Añadía Reeves que un estudio reciente mostró que, por cada dólar que los consumidores se ahorraban en energía, se gastan un extra de 73 centavos en otra parte.
Volviendo a nuestro país, Jaume Puig, director general de GVC Gaesco Gestión, también habla de los efectos positivos de un bajo precio del crudo: "Un precio bajo del petróleo durante más tiempo es una gran noticia tanto para la economía mundial como para el conjunto de resultados empresariales. Un 50% de descenso del precio del petróleo implica un aumento de un 1% de crecimiento del PIB mundial. No compartimos la reciente evolución en paralelo de los precios del petróleo y de las bolsas. Deberían evolucionar en sentido contrario".
Lea también: El petróleo se desploma un 10% en la semana hasta mínimos de 2004
LA DEMANDA SIGUE EN MÁXIMOS
Otro aspecto que se valora como un elemento negativo es el que la caída en el precio del crudo pueda deberse a que la debilidad económica mundial esté suponiendo un debilitamiento de la demanda. En este punto, habría que entrar a analizar los "líos" en el seno de la OPEP (Organización de Países Exportadores de Petróleo) y la incapacidad de las potencias exportadoras para ponerse de acuerdo y recortar una producción en máximos.
Desde GVC recalcan, así, que el consumo de petróleo en el mundo se encuentra en niveles de máximos históricos y afirman tajantes: "Cada día se consumen en el mundo 95 millones de barriles de petróleo (...) El bajo precio se debe a un exceso de oferta y no a la falta de demanda".
Como saben, las tensiones entre los países exportadores de petróleo, encabezadas por Arabia Saudí e Irán, han propiciado esas caídas en el precio del crudo precisamente porque, como dicen algunos expertos, cada potencia exportadora mira por sus propios intereses y sigue produciendo sin importarle lo que haga el de al lado. Así, sin ir más lejos, la retirada de las sanciones a Irán ya está suponiendo la puesta en circulación de otros 50.000 barriles por día, lo que supondrá aún más presión para los precios precisamente, por ese exceso de oferta.
Lee además:
¿Dónde colocará Irán los 500.000 barriles de petróleo diarios que prevé producir?
El petróleo se desploma un 6%: Morgan Stanley advierte que puede caer hasta los 20 dólares
¿Cuál es el futuro del precio del petróleo? Analistas pronostican más caídas y crisis