El portavoz de Más País-Equo en el Congreso, Íñigo Errejón, ha defendido la posibilidad de topar salarios máximos tras conocerse que en 2022 el presidente de BBVA, Carlos Torres Vila, obtuvo una retribución total de 8,29 millones de euros, un 5,8% más que el año precedente.
A colación de la nueva subida del Salario Mínimo Interprofesional (SMI), que Errejón califica de "muy buena noticia", el diputado ha instado a "empezar a hablar también de sueldos máximos".
"Hay que empezar a fijar también topes por arriba", ha insistido Errejón, quien ha apuntado que en la actualidad el país "lo está pasando muy mal". "Hay que fijarse también qué actividades retribuimos y cómo las retribuimos", ha apostillado Errejón, quien también ha criticado a la entidad financiera por cargar contra el nuevo impuesto a la banca aprobado por las Cortes.
RECUERDA A LA CEOE QUE EL 70% DE SUS FONDOS SON PÚBLICOS
Por otro lado, Íñigo Errejón ha criticado el nuevo salario cercano a los 400.000 euros anuales de Antonio Garamendi, presidente de la CEOE, quien no se presentó en las última mesa de negociación con Gobierno y sindicatos para pactar una nueva subida del SMI.
En concreto, Errejón ha subrayado que el 70% de los fondos con los que funciona la patronal son públicos. El diputado ha ironizado sobre los supuestos efectos nocivos que provocarían los recientes incrementos del salario mínimo en el mercado laboral.
Así, ha remarcado que las subidas de sueldos "no provocan plagas de langostas". "El ejército de los agoreros va de error en error", ha apostillado el diputado.
BILDU DEFIENDE UNA REGIONALIZACIÓN DEL SMI
Por su parte, el diputado de EH Bildu, Oskar Matute, ha celebrado la subida del Salario Mínimo Interprofesional (SMI) que se aprobará en Consejo de Ministros este martes, aunque ha defendido una regionalización de este salario, de manera que el SMI se adapte a las "diferentes realidades socioeconómicas" de cada territorio.
"Nos parece bien que exista un suelo común de 1.080 euros y creemos que las comunidades autónomas tienen que tener la posibilidad de adecuar ese SMI a sus propias realidades", ha explicado el diputado en rueda de prensa.
El diputado de Bildu también ha criticado el nuevo salario de Garamendi, ya que ven "paradójico" que cobrando 400.000 euros brutos al año tenga "dificultades de índole ético" para subirle el salario a los trabajadores.