El IPC de la Eurozona se mantiene en territorio negativo, -0,2%, en el mes de agosto. Cabe destacar que esta cifra está dentro de las expectativas del consenso de economistas.
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Este indicador es proporcionado por Eurostat y sirve para hacer una foto de los precios de los bienes y servicios en la Zona Euro. Un resultado superior al esperado suele ser históricamente alcista para el euro.
Desde Oxford Economics apuntaron recientemente que "pese a la cierta recuperación de los precios del petróleo y los alimentos, han estado lejos de compensar las fuerzas desinflacionarias desatadas por la pandemia".
De cara al futuro, "esperamos que la inflación se mantenga moderada y muy por debajo del objetivo del BCE ya que el poder de las empresas para fijar los precios seguirá siendo limitado, el mercado del empleo seguirá estando afectado y los precios energéticos seguirán estando contenidos".
"Si la inflación subyacente sigue cayendo, se elevará la presión ejercida sobre el BCE de Lagarde para que amplíe su apoyo monetario", concluyen.
