- El dólar canadiense prosigue su rally y gana un 2,5% después de la decisión de subir los tipos del Banco de Canadá
- La libra sigue apuntalada por los buenos datos del mercado laboral de Reino Unido y se dispara a máximos de una semana
La gran noticia que recorre el mercado de las divisas es el retroceso del dólar ante todos sus rivales, después de que la presidente de la Reserva Federal de EEUU (Fed), Janet Yellen, haya dejado claro que no tiene ninguna prisa en seguir subiendo los tipos de interés. La falta de premura de la banquera central a la hora de proseguir con la normalización monetaria ha impactado en un dólar que estaba pagando las consecuencias del último capítulo del ’Rusiagate’, sobre los vínculos de los miembros de la campaña electoral del presidente estadounidense, Donald Trump, y Rusia. No obstante, los operadores no han aprovechado el ‘rally anti-dólar’ para impulsar al euro.
La divisa comunitaria, en cambio, se negocia un 0,6% por debajo de los máximos de 14 meses alcanzados durante las primeras horas del miércoles, en los 1,1490 dólares y, de hecho, ha llegado a depreciarse hasta niveles por debajo de los 1,1400 dólares, hasta alcanzar mínimos de una semana. Kathy Lien, analista de BK Asset Management, no esconde su sorpresa ante el desempeño de la moneda europea ya que “desde el lado de los datos macroeconómicos, los resultados fueron lo suficientemente buenos como para impulsar a la divisa, con la producción industrial de la Eurozona catapultándose a un máximo de seis meses”. Para la experta, “la única razón para justificar la pausa en el euro es la “caída de los rendimientos de los bonos europeos, además de que crece la preocupación en los mercados de que el Banco Central Europeo (BCE) no esté dispuesto a abordar todavía la retirada de los estímulos”.
De hecho, la moneda ha cedido otra vez posiciones hasta su peor nivel en siete días, cerca de los 1,1370 dólares, después de los comentarios del gobernador del Banco Central de Lituania sobre que las compras de activos del regulador monetario proseguirán algunos años. El euro ha recuperado posiciones después de que 'Reuters' haya publicado una historia completamente diferente: que el BCE empezará a dar señales claras sobre el fin de su política ultra-expansiva en la reunión del mes de septiembre.
Crece la preocupación en los mercados de que el Banco Central Europeo (BCE) no esté dispuesto a abordar todavía la retirada de los estímulos
También hay factores técnicos y es que en rango semanal se ubica una importante resistencia en el área de los 1,1500 dólares que frenará el ascenso de la divisa compartida, aunque, según señala José María Rodríguez, analista de Bolsamanía, "el euro/dólar seguirá su curso hacia los máximos de 2016, en los 1,1617 dólares, mientras se mantenga por encima de los 1,1300 dólares".
Pero el del euro es un caso aislado. El resto de divisas han aprovechado la huída de los alcistas del la moneda de EEUU para volver a la carga. La libra se ha disparado a máximos de una semana, hasta los 1,2950 dólares, dada la combinación de factores entre el declive del dólar y el colchón del soporte ubicado en los 1,2850 dólares, un escenario en el que el informe del mercado laboral, que ha reportado que el desempleo ha caído a su mejor nivel en 42 años "han dado la excusa perfecta para impulsar de nuevo a la moneda británica", señala Lien.
En Asia, la mayoría de monedas dejan ganancias, siendo el won surcoreano quien lidera el buen desempeño visto en las monedas de la región y se aprecia un 0,8% hasta alcanzar su mejor precio en dos semanas, después de que el banco central del país haya decidido dejar los tipos sin cambios. El yuan chino aumenta un 0,2%, al igual que la rupia india, el peso filipino -que se desmarca de sus recientes mínimos de 11 años- o el dólar de Taiwan.
El yen, por su parte, cede algo de terreno este jueves, después de haberse llegado a cotizar por debajo de los 113,00 yenes por cada dólar, su mejor precio de una semana.
EL DÓLAR CANADIENSE CATAPULTADO A MÁXIMOS DE UN AÑO
Punto y aparte merece el dólar de Canadá (´loonie'). La divisa se ha disparado un 2,6% después de anuncio de subida de tipos del Banco de Canadá (BoC por sus siglas en inglés), por primera vez en siete años, hasta su mejor nivel en un año. Aunque este jueves retrocede desde los 1,2680 'loonies' alcanzados el miércoles, hasta precios alrededor de los 1,2740 unidades, expertos pronostican que la moneda podría acabar negociándose en las 1,2500 unidades.
El análisis de expertos como Hussein Sayed, de FXTM, pasa por destacar la importancia del movimiento del BoC, ya que manda la señal unívoca al mercado de que el resto de supervisores monetarios del mundo "no se mueve de forma divergente con la Fed". "A pesar de sus diferentes trayectorias hay un movimiento coordinado hacia una normalización de las políticas monetarias a escala mundial y los mercados ahora se preguntan quién será el próximo en dar el paso: el Banco Central Europeo, el Banco de Inglaterra, el Riksbank o el Banco de Noruega", apunta el experto.
