El pleno del Congreso ha tumbado este jueves las enmiendas a la totalidad presentadas por PP y Vox para conservar el artículo del Código Penal dirigido a los piquetes de huelga, con penas de cárcel concretas, e incluso ampliarlas, tal y como propone el partido liderado por Santiago Abascal.
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PSOE, Unidas Podemos, Esquerra Republicana, el PNV, EH-Bildu, Más País-Equo, la CUP, el BNG, Compromís y Nueva Canarias han rechazado sendas enmiendas de totalidad.
Respecto a la enmienda de Vox, el PP se ha sumado al voto en contra y la propuesta ha sido únicamente apoyada por la formación de Santiago Abascal.
La proposición de ley, admitida el pasado octubre, ha superado su segunda votación ante el Pleno del Congreso y pasará a debate ante la Comisión de Justicia de la Cámara Baja.
PP y Vox pretendían tumbar la proposición de ley del PSOE, que contempla la derogación del artículo 315.3 del Código Penal, que establece penas de cárcel de hasta tres años para los piquetes y la anulación de las sentencias aplicadas con arreglo a ese precepto.
VOX, PP Y CS SE OPONEN A LA DEROGACIÓN
El portavoz laboral de Vox, Juan José Aizcorbe, ha defendido que el delito de coacciones estudia penas de prisión más duras, por lo que ve justo endurecer el castigo y ha avisado que la derogación se opone a derechos como el del trabajo, la dignidad, la igualdad, la integridad moral o la libertad.
Por su parte, el PP ha justificado mantener este artículo acogiéndose a que "el derecho a la huelga no es ilimitado" y afirmando que a los trabajadores "no les preocupa el derecho a la huelga, sino al trabajo", según ha dicho su diputado Miguel Ángel Jerez.
Pablo Cambronero, de Cs, en línea con los populares, cree que la derogación supone "un ataque a la libertad de los ciudadanos", y persigue que en una huelga el Código Penal "no tenga nada que decir", y que "impere la ley de la selva".
VOX: PENAS DE HASTA CUATRO AÑOS Y MEDIO DE CÁRCEL
Con enmienda a la totalidad, el PP proponía recuperar en la iniciativa la redacción vigente, que castiga las coacciones para iniciar o continuar una huelga con penas de prisión de un año y nueve meses hasta tres años, o con la pena de multa de 18 meses a 24 meses.
Vox ha ido más lejos y en su enmienda buscaba conservar este artículo endureciendo el castigo, con penas de prisión mínimas de dos años y medio, pudiendo llegar a los cuatro años y medio. Concretamente, las penas de prisión contempladas van de dos años y seis meses a cuatro años y seis meses, y la multa de 12 a 18 meses.