- Han optado por clasificar las criptodivisas como activos
- Las monedas virtuales necesitan monitorización, no prohibición, reclama el gobernador del Banco de italia, Ignazio Visco
- Tom Lee cree que las 'altcoins' dan carpetazo al mercado bajista
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Los temores se han disipado. La postura mucho más moderada de lo esperado que ha trascendido de la cumbre del G-20 sobre el mercado de las criptodivisas, ha animado las compras en este mercado y ha elevado al bitcoin hasta niveles de precio por encima de los 9.000 dólares. La capitalización total, sumando todas las ‘altcoins’, sin embargo, se ha quedado en los 350.000 dólares, ya que el mercado adolece de una postura bajista en las ‘criptos’ alternativas a la de Satoshi Nakamoto, que está próxima a acabarse, según el analista de Fundstrat Global Advisors, Tom Lee.
En declaraciones a la CNBC, ha explicado que espera una remontada de las divisas y tokens de pequeña capitalización. Una subida que ya podría haber empezado. Aunque en su conjunto las ‘altcoins’ aún se mantienen lejos de sus recientes máximos y algunas, como el ethereum -que se cambia cerca de los 600 dólares- y el ripple -que cotza en 0,71 dólares- han dejado nuevos mínimos de 2018 este pasado fin de semana, experimentan un auge de entre un 5% y un 10% este miércoles. El bitcoin cash ha recuperado los 1.000 dólares, con una subida de casi un 9%.
No obstante, el jefe de investigaciones de Fundstrat cree que el bitcoin sigue siendo la mejor apuesta para los inversores. “Creo que los inversores se sienten cada vez más cómodos con la idea de que el bitcoin es una materia prima (..) además, con un entorno cambiante en cuanto a regulaciones sobre los tokens, la criptomoneda más operada está en una esfera diferente”.
NUEVAS REGULACIONES, PERO SIN PRISAS
Precisamente, ha sido el cónclave de ministros de Economía y banqueros centrales, que se ha celebrado en Buenos Aires el 19 y 20 de marzo lo que ha mantenido al mercado presionado. Una vez superado, dos ideas han quedado claras: las criptomonedas no son divisas, sino activos -y deben ser tratadas como tales- y la regulación irá encaminada a monitorizar el desarrollo de este boyante mercado, no a su prohibición. Así se ha expresado, sin ir más lejos, el gobernador del Banco de Italia, Ignazio Visco, que ha reconocido riesgos a estos flamantes activos, pero ha remarcado que “ha habido un consenso en torno a que debemos seguir trabajado en la vertiente de la estabilidad, pero teniendo presente que no debemos excluir este mercado”.
Este tono benévolo ha impregnado también la carta conjunta emitida por las potencias asistentes a la cumbre. En el texto, han acordado avanzar en el diálogo internacional respecto a la posible regulación de las criptomonedas, al tiempo que han advertido sobre cuestiones relacionadas con los consumidores, la fiscalidad o la integridad del mercado.
"Nos comprometemos a implementar los estándares del Grupo de Acción Financiera Internacional (GAFI) en materia de criptoactivos una vez se hayan revisado y reclamamos su aplicación global. Pedimos a los organismos que establecen los estándares internacionales que continúen la supervisión de las criptomonedas y sus riesgos, y evalúen las acciones multilaterales necesarias", reza la carta de consenso del foro económico.
