- La moneda única visita los 1,15 dólares tras las noticias de que un euroescéptico liderará el Comité de Finanzas del Senado italiano
El euro ha recalado en las inmediaciones de los 1,15 dólares este jueves, hasta un nuevo mínimo anual en los 1,1508 dólares, marginalmente por debajo del precio del 29 de mayo, cuando llegó a cambiarse en los 1,1510 dólares. La moneda comunitaria ha visitado precios no vistos desde mediados de julio de 2017, muy presionada después de las declaraciones del miembro del Consejo de Gobierno del Banco Central Europeo (BCE), Edwald Nowotny, sobre el tipo de cambio del euro/dólar. Las noticias de que un euroescéptico estará al frente de un comité del Senado italiano han acabado por dinamitar a la divisa.
El euro/dólar no ha aguantado los 1,1550 dólares, tras los últimos informes que apuntan a la llegada de Alberto Bagnai, un euroescéptico, para dirigir el Comité de Finanzas del Senado. Las opiniones de Bagnai sobre el euro no son un secreto para nadie. "Deshacerse del euro será costoso", apuntaba el año pasado, "aunque es menos costoso que su alternativa, que es el estancamiento prolongado de la economía europea y, por tanto, de la economía mundial ante el creciente riesgo de colapso financiero".
Horas antes, otras declaraciones, esta vez la de Nowotny ya habían supuesto un mazazo para la 'divisa única'. “Veo al euro depreciarse contra el dólar”, señaló el banquero central, una sentencia que dejó a los analistas patidifusos y que deja claro que el BCE está dispuesto a entrar en la ‘guerra de divisas’ para afrontar los aranceles y disparar la inflación.
“No es habitual que los bancos centrales hagan comentarios tan directos sobre el mercado de las divisas, por lo que los inversores no se lo pensaron dos veces y vendieron el euro, que ahora pone a prueba el crucial nivel de los 1,1550 dólares”, indican los expertos de Sucden Financial. Además de no esconder su estupefacción, la opinión casi unánime de los expertos es que el BCE quiere abaratar el euro para inflar los precios, pero además, una moneda compartida más barata es la mejor arma ante la guerra comercial que se fragua.
“Dada la falta de inflación en Eurozona y la escalada de las tensiones comerciales de Washington, el BCE está haciendo un esfuerzo adicional para compensar cualquier medida arancelaria de la Administración Trump”, argumenta Boris Schlossberg, analista de BK Asset Mangement. “El euro, por lo tanto, sigue siendo vulnerable a nuevas ventas”, agrega.
LA DIVERGENCIA DE TIPOS IMPULSA AL DÓLAR
Los inversores también han impulsado al dólar, cuyo índice de referencia -que mide su desempeño contra una cesta de seis diviss rivales- sigue en máximos de 11 meses, ya que han seguido tomando posiciones frente a lo que consideran que será un largo período de divergencia en cuanto a tipos de interés de la Reserva Federal (Fed) y el resto de bancos centrales. Un sentimiento que, según los expertos de Commerzbank "no se ha descontado completamente por el mercado".
Las preocupaciones sobre la escalada en un conflicto comercial entre Estados Unidos y China, subrayadas por los comentarios de los principales banqueros centrales el miércoles en Sintra, también han impulsado al 'billete verde' ya que los operadores consideran que una disputa arancelaria añadirá presión a los precios de la economía estadounidense, obligando a la Reserva Federal a incrementar aún más los tipos.
La fortaleza del dólar ha pesado también en la libra, que ha seguido estirando su figura bajista este jueves, muy presionada, a pesar de que la primera ministra británica, Theresa May, haya logrado mantener el timón en las negociaciones sobre el Brexit. Después de recalar en los 1,3150 dólares durante dos jornadas, en una intensa semana en el Parlamento británico, el ‘cable’ (como se conoce a la libra/dólar) ha seguido cediendo terreno, de camino a los 1,3100 dólares.
Horas después, ha recuperado algo del terreno perdido y ha dejado un máximo en la sesión por encima de los 1,32 dólares, tras conocerse que han sido tres los miembros del Comité de Política Monetaria del Banco de Inglaterra (BoE por sus siglas en inglés) que se han decantado por una subida de tipos. En su reunión de junio, un nuevo integrante de este comité se ha añadido a los partidarios de elevar las tasas desde el 0,5% actual, por lo que agosto se perfila como una buena oportunidad para que el supervisor monetario dé el paso.
Sin embargo, los analistas se esfuerzan en poner coto al entusiasmo de los compradores de la libra, ya que el voto 6 - 3 señala que "el banco central está más cercado al Banco Central Europeo (BCE) que a la Reserva Federal a la hora de afrontar la normalización monetaria", avisa Russ Mould, director de AJ Bell Investment.
En otros lugares, el peso mexicano ha subido un 0,8% contra el dólar ante la perspectiva de que Banxico subirá el tipo de interés en 25 puntos básicos hasta el 7,75% este jueves.