- La bajada del precio del petróleo y de los tipos de interés, factores entre otros de la desaceleración para próximos años
- Cree que el déficit público se situará en el 4,9% para 2016, ocho décimas más que en su anterior previsión
El Banco de España ha subido hasta el 3,2% su previsión de crecimiento para la tasa del PIB de 2016, a pesar según dice de los probables "efectos adversos" provocados por la actual situación de interinidad del Gobierno en funciones de Mariano Rajoy y su prolongación en el tiempo. La entidad mantiene a su vez sus tasas de crecimiento previstas para 2017 (2,3%) y 2018 (2,1%), por lo que habría una desaceleración del crecimiento de la economía española.
"Esta desaceleración se explicaría por la pérdida de pujanza de algunos de los factores que han impulsado la actividad en la etapa más reciente, como la bajada del precio del petróleo y de los tipos de interés, la depreciación del euro o la orientación expansiva que ha adoptado la política fiscal en los dos últimos ejercicios", resalta el Banco de España en sus últimas previsiones macroeconómicas de septiembre.
Respecto al tercer trimestre, el organismo gobernado por Luis María Linda estima que se ha incrementado un 0,7%, una décima menos que la de los cuatro trimestres anteriores, todo ello dicen en un contexto de fortaleza del gasto de familias y empresas y un "elevado" crecimiento del empleo y de las exportaciones "pese a la debilidad del entorno global".
SIN GOBIERNO, SIN MEDIDAS
Los efectos adversos de no tener Gobierno "se habrían visto contrarrestados durante este período por otros factores"
El Banco de España cree a su vez que estos posibles efectos adversos por la interinidad del actual Gobierno "se habrían visto contrarrestados durante este período por otros factores", pero no descarta que este impacto negativo se acabe produciendo, puesto que esta situación impide al Ejecutivo el poder tomar medidas para controlar el déficit, además de afectar a la confianza del sector privado y sus decisiones de consumo e inversión.
El posible retraso en la formación de un Gobierno para España afecta por tanto al calendario de aprobación de reformas estructurales "necesarias" para el crecimiento de la economía de la nación. "Cualquier retraso en este sentido conlleva consecuencias adversas sobre la actividad, toda vez que habitualmente transcurren lapsos de tiempo no desdeñables entre la adopción de las medidas y el momento en que estas empiezan a surtir efectos palpables", asevera.
NO SE CUMPLIRÁN OBJETIVOS DE DÉFICIT
El Banco de España no cree que se puedan cumplir los objetivos de déficit de Bruselas ni para este año ni para el 2017. La entidad prevé que el déficit público acabe en el 4,9% para este año, es decir, ocho décimas superior que lo que dijo esperaba en junio. El país por tanto estaría tres décimas por encima de lo prometido a Europa. Para el próximo año, el déficit acabará en el 3,6% vaticina, medio punto por encima de lo acordado con Bruselas, mientras que para 2018 estiman que finalizará en el 3,1%
A pesar de estos malos augurios respecto del déficit, el organismo monetario ha subrayado que en estas últimas previsiones no están recogidas medidas adicionales tomadas por el Ejecutivo, como pueda ser el aumento del pago fraccionado del Impuesto sobre Sociedades, a través del cual el Gobierno espera recaudar 8.000 millones más.
MEJORA TAMBIÉN DE LA PREVISIÓN DE EMPLEO...
El Banco de España espera a su vez que el empleo siga creándose a tasas elevadas, por lo que mejora para 2016 en cuatro décimas su previsión del crecimiento del trabajo, hasta el 2,9%, manteniendo a su vez la previsión del 2% para 2017 y del 1,8% para 2018.
Por tanto, la tasa de paro según el Banco de España será del 19% en este año, siete décimas por debajo de lo que esperaba en junio. También cree que dicha tasa bajará al 17,8% para el año que viene y que se situará finalmente en el 17% para el año 2018.
... Y ALZAS EN LA INFLACIÓN ESPERADA
Respecto a los precios, el Banco de España cree que la tasa del IPC descenderá un 0,3% este año, tres décimas por encima de lo que pensaba en junio, mientras que para el 2017 se volverá a positivo y aumentarán los precios un 1,5% y un 1,6% en 2018.