El plan del Gobierno para renovar el parque automovilístico español, que tiene de media más de 12 años, ha causado buenas sensaciones en el sector y tanto los constructores como la patronal ANFAC han reconocido que es “positivo descarbonizar los vehículos e incentivar los coches de emisiones cero y eléctricos” ya que “incentivará el mercado interno” que ahora está al 50%. No obstante, José Vicente de los Mozos, presidente de Renault España y de la Asociación Española de Fabricantes de Automóviles y Camiones ha pedido “acelerar” en consonancia la infraestructura del coche eléctrico, incrementando los puntos de carga hasta cifras que se equiparen a las de otros países vecinos como Francia.
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Además de los estímulos al consumo, el presidente de ANFAC ha demandado, durante la cumbre empresarial de la CEOE, un plan estratégico que permita seguir potenciando la “competitividad” de nuestro país, el segundo productor de coches en Europa y el noveno a nivel mundial. En este sentido, ha recordado la hoja de ruta de la patronal de fabricantes de vehículos con horizonte 2040, que se presentó al Gobierno en marzo y que dibujaba hacia dónde debería ir el sector, que quedó “truncada con la pandemia”. Después, en los meses siguientes, ha relatado que se trabajó en un protocolo sanitario que permitiera reanudar la producción en el que “hemos sido pioneros”, ha asegurado.
Sin embargo, el ritmo de fabricación anterior a la pandemia, de 2,8 millones de unidades, no se recuperará en el corto plazo, lo que dejará un recorte en la producción de 2020 de 700.000 unidades, ha explicado De los Mozos. Esta coyuntura ha hecho más acuciante el problema que ya se reveló a finales de 2019 de sobrecapacidad en esta industria a nivel global, aspecto que sólo se combate, a juicio del presidente de ANFAC, alimentando la "competitividad" del mercado español.
El presidente de Renault España ha señalado que la única manera de potenciar esta cualidad en un momento en que "el coche está sufriendo un cambio importante de conectividad, emisiones y movilidad" es asegurarse la asignación de nuevos productos eléctricos. De lo contrario, "si trabajamos con industrias residuales tendremos más disgustos como el de Nissan", ha indicado De los Mozos. Asimismo, para asegurar el liderazgo de una industria que llega al 10% del PIB y supone el 60% del total en España, se debe "avanzar en al digitalización, en la automatización y seguir contando con mano de obra cualificada", ha señalado.
Por último, ha hecho un llamamiento a las administraciones para que "los políticos cuenten hasta tres antes de hacer declaraciones". "Es importante que las casas matrices tengan garantías de que España es un país ‘firendly’" con el sector, ha incidido, porque "no se tiene que ver como un país que ataca al automóvil y, además, los constructores necesitan seguridad jurídica y un marco homogéneo".
RECUPERACIÓN Y EVITAR LA DESTRUCCIÓN DE EMPLEO
A su turno, Raúl Palacios, presidente de la Asociación Nacional de Vendedores de Vehículos a Motor, Reparación y Recambios (Ganvam) ha remarcado que "es necesario buscar fórmulas de colaboración público-privada para compartir gastos y evitar la destrucción de empleo. Y, para ello, se podría poner en marcha un pacto entre empresas y el Estado".
"La clave para la recuperación es garantizar que las empresas continúen con su actividad sin destruir el empleo y que las familias puedan seguir consumiendo. La demanda depende de la renta disponible y por ello hay que asegurar el empleo", ha manifestado.
