Las peticiones semanales de desempleo han crecido menos de lo esperado en EEUU durante la semana pasada. Concretamente, se han situado en los 745.000, respecto a las 750.000 solicitudes anticipadas por el consenso de analistas.
Eso sí, la cifra actual sigue siendo superior a la registrada en la semana anterior, que se situó en las 736.000 peticiones semanales.
Por estados, los más golpeados por la pandemia han sido Texas, Ohio y Nueva York, especialmente la primera, que ha visto un incremento de 17.769 en estas solicitudes durante la última semana de febrero. El dato llega después de un mal informe de empleo ADP pero tras unas buenas perspectivas para la mayor economía del mundo.
Sin ir más lejos, la Fed de Atlanta anticipa un rebote del 10% en este primer trimestre del año. En cualquier caso, las miradas se dirigen este viernes al dato de paro y al de creación de nóminas no agrícolas correspondiente a febrero, que seguirá dando pistas sobre la recuperación de EEUU.