Los tambores de recesión se escuchan cada vez con más fuerza a ambos lados del Atlántico. Muchos expertos dan ya por descontado que ni Europa ni Estados Unidos se librarán de esta situación, tras el cóctel de incertidumbre e inflación que ha provocado la guerra de Ucrania. No obstante, parece que el Viejo Continente 'caerá' primero.
"La zona euro se ha visto más afectada que EEUU por la crisis de los precios de la energía, por lo que prevemos que la economía de la zona euro entre en recesión antes que la de EEUU". Son palabras de los expertos de Berenberg, que apuntan que "si no fuera por el probable regreso de los turistas de verano después de la crisis del Covid-19, la recesión probablemente ya habría comenzado" en Europa.
En opinión de los analistas de la firma alemana, "dado que un cierto alivio de las restricciones de la oferta y un cierto descenso de los precios de la energía a lo largo de 2023 pueden suponer una mayor diferencia para la Eurozona, la recesión puede terminar a mediados de 2023", aunque sus proyecciones apuntan que en el conjunto de 2023 habrá un "descenso interanual del PIB real del 0,8%" en la región del euro.
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"La respuesta de la Fed a la alta inflación provocará una recesión en EEUU en 2023""Se avecina una recesión" y en su opinión será algo inevitable, también para EEUU. Y es que "a medida que la subida de los tipos de interés vaya pasando factura, esperamos que la economía estadounidense se estanque a finales de 2022 y se contraiga en los tres primeros trimestres de 2023, lo que supondría un descenso del 0,4% interanual del PIB en 2023", señalan los estrategas de Berenberg. Creen, de hecho, que "una vuelta al crecimiento a partir de finales de 2023 elevará el PIB un 1% en 2024", pero lo cierto es que el próximo año será complicado para la primer economía del mundo.
Estos expertos apuntan que la "agresiva reacción" de la Reserva Federal (Fed) ante el aumento de la inflación estadounidense hasta el 8,6% interanual en mayo y el nuevo repunte de los precios del gas en Europa "han inclinado la balanza: una caída del PIB en EEUU y Europa ha pasado de ser un riesgo grave a nuestro caso base".
UNA DESACELERACIÓN "INUSUAL"
Aunque, según dicen, será una "desaceleración inusual" porque en muchos aspectos "la situación de partida sigue siendo favorable" por cinco motivos:
-La demanda de mano de obra está cerca de niveles récord a ambos lados del Atlántico.
-Los hogares tienen un exceso de ahorro.
-La mayoría de las empresas no han acumulado un exceso de capacidades y/o inventarios que ahora haya que corregir
-Los gobiernos están aumentando la inversión.
-Las instituciones financieras gozan en su mayoría de buena salud.
Por ello, "con suerte la recesión será poco profunda" y "a medida que la inflación retroceda en el tiempo, los ingresos reales disponibles podrían empezar a aumentar de nuevo a finales de 2023". Sin embargo, destacan los expertos de Berenberg, "reducir la inflación desde más del 8% hasta más cerca del 2% no será sencillo, incluso cuando los efectos de base de la alta inflación anterior se desvanezcan rápidamente".
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El aviso de Deutsche Bank: la inflación es el "mayor veneno" para la economía mundial"Como el miedo puede engendrar miedo, las recesiones pueden adquirir una dinámica propia. Además, suelen revelar fragilidades que no eran evidentes mientras la actividad económica estaba en expansión", destacan.
RECESIÓN TAMBIÉN EN REINO UNIDO
Y creen que la recesión también llegará a Reino Unido. "Parece estar en marcha a medida que el empeoramiento de los choques de oferta, el aumento de la inflación y el endurecimiento de la política monetaria abruman a los fundamentos mayormente buenos", apuntan los expertos de la firma alemana.
"Con una duración de cuatro trimestres, desde el segundo trimestre de 2022 hasta el primero de 2023, proyectamos un impacto del 2,2% en el PIB real de punta a punta", señalan sobre la economía británica.
Sus proyecciones sobre los bancos centrales son las siguientes: "Creemos que la necesidad imperiosa de luchar contra la inflación limitará la capacidad de los bancos centrales para actuar en previsión del descenso de la producción. Esperamos que la Reserva Federal de EEUU suba los tipos hasta un máximo del 3,75% en el primer trimestre de 2023 y que empiece a recortarlos a finales de ese año para alcanzar el 3% en 2024".
Por su parte, sobre el Banco Central Europeo (BCE), que creen que "se mueve con lentitud", dicen que "probablemente dejará de subir los tipos al alcanzar un tipo de refinanciación del 1% en diciembre de 2022 y se mantendrá en ese nivel aún muy bajo en 2023 y 2024". ¿Y el Banco de Inglaterra (BoE)? "Endurecerá su política monetaria de forma agresiva durante la crisis hasta alcanzar un tipo de interés máximo del 2,5% en el segundo trimestre de 2023". En su opinión, la reducción de la inflación "puede dar paso a recortes de 100 puntos básicos a partir de entonces".