El pasado abril la economía española registró un déficit de 1.300 millones de euros, frente al superávit de 3.100 millones de abril de 2019, según los datos de la balanza de pagos publicados este martes por el Banco de España.
El organismo supervisor indicó que esta evolución del superávit del cuarto mes del año pasado al déficit en este se ha producido por la desaparición del superávit de turismo (3.900 millones en abril de 2019), rúbrica para la que tanto los ingresos como los pagos se estiman nulos.
El saldo de la balanza por cuenta corriente (que incluye los ingresos y pagos con el exterior por las exportaciones e importaciones de bienes y servicios y por las rentas primara y secundaria) fue negativo, de 1.500 millones, frente a los 2.900 millones positivos de abril de 2019.
Por componentes, el saldo de bienes y servicios disminuyó hasta los 500 millones, desde los 4.500 millones del mismo mes del año anterior, con caídas muy pronunciadas tanto de las exportaciones como de las importaciones. Para el resto de bienes y servicios, las caídas fueron del 38% en las exportaciones y del 35% en las importaciones.
El saldo de las rentas primaria y secundaria fue de 1.000 millones en negativo, frente a los 1.500, también negativos, de abril de 2019. Por su parte, la cuenta de capital mostró un superávit de 200 millones.
ACUMULADO
En términos acumulados de 12 meses, en el mes de abril de 2020, el saldo de la capacidad de financiación, alcanzó 25.100 millones, frente a los 27.600 millones acumulados en abril de 2019. En los mismos términos, el saldo de la cuenta corriente fue de 21.200 millones, cercano a los 21.500 millones de un año antes. El saldo acumulado de bienes y servicios alcanzó los 30.200 millones, por debajo del registrado en el mismo mes del año anterior (31.900).
En abril de 2020 el saldo de la cuenta financiera excluyendo el Banco de España mostró un signo positivo, con un importe de 16.300 millones. Según el organismo, la mayor aportación a este saldo fue la de la inversión de cartera, que presentó un saldo de 15.700 millones, debido principalmente a la desinversión neta de los no residentes en instrumentos financieros emitidos por residentes, sobre todo en títulos de deuda.
La otra inversión, que incluye, fundamentalmente, préstamos y depósitos, presentó un saldo positivo de 9.000 millones, resultado de una disminución de los pasivos superior a la de los activos. La cuenta financiera del Banco de España frente al exterior registró un saldo neto de -20.300 millones.
En términos acumulados de 12 meses, en abril de 2020, el saldo neto de la cuenta financiera excluyendo el Banco de España fue de 42.300 millones, frente a los 32.200 millones registrados hasta abril de 2019. La mayor aportación a este saldo fue la de la otra inversión, con una contribución de 71.500 millones, destacando las inversiones netas en el extranjero de los residentes en España (que alcanzaron en el periodo los 72.600 millones, frente a los 63.800 millones acumulados hasta abril de 2019).
El saldo positivo de la otra inversión se vio en parte contrarrestado por el de la inversión de cartera, que registró una aportación de -24.600 millones, debido a un aumento de las inversiones en España por parte de no residentes, superior al de las inversiones en el exterior de los residentes (70.800 millones frente a 46.300 millones).
