El Producto Interior Bruto (PIB) de EEUU creció un 33,4% en el tercer trimestre, lo que supone una cifra récord, según los datos publicados este martes por el Departamento de Comercio. El repunte viene después de la caída histórica del 31,4% entre los meses de abril y junio.
El gasto del consumidor, el principal motor de la economía, se revisó ligeramente al alza junto con las inversiones fijas de las empresas. Estos fueron compensados en parte por una revisión a la baja de las exportaciones.
El gasto del consumidor, que representa más de dos tercios de la actividad económica de EEUU, lideró la amplia recuperación el último trimestre. Pero el consumo parece haberse enfriado desde entonces, y las ventas minoristas disminuyeron en octubre y noviembre debido a que los ingresos de los hogares se vieron presionados en medio del vencimiento de un subsidio de desempleo semanal financiado por el Gobierno.
La Reserva Federal de EEUU (Fed) revisó recientemente al alza su pronóstico de PIB para 2020 a una disminución del 2,4% desde las estimaciones anteriores de una caída del 3,7%. Su presidente, Jerome Powell, pidió la semana pasada a la desesperada nuevas ayudas económicas. "Las ayudas fiscales hacen falta ya porque los próximos meses van a ser los más duros.
Esta semana, EEUU aprobó un nuevo plan de estímulos fiscales y económicos por valor de 900.000 millones de dólares para mitigar el impacto de la pandemia de coronavirus, que incluye cheques de 600 dólares para los ciudadanos con menores ingresos.
Los analistas de Oxford Economics señalan que, en vísperas de 2021, "la economía tiene muy poco impulso ya que una tercera ola de Covid catastrófica está limitando la movilidad, frenando el empleo y restringiendo la demanda. El paquete de ayuda fiscal de 900.000 millones de dólares tiene un retraso de meses y probablemente no cubrirá lo que se necesita para evitar un invierno duro, pero es mejor que nada. Ayudará a amortiguar parcialmente la actual desaceleración económica y proporcionará un mayor dinamismo a la economía durante la fase inicial de lanzamiento de la vacuna".
Creen que la economía de EEUU "comenzará el año con cautela y será propensa a sufrir contratiempos durante la delicada fase de difusión de la vacuna. Pero, a medida que toma forma el cóctel de mayores transferencias gubernamentales y vacunaciones, deberíamos esperar una actividad gradualmente firme que conduzca a un mini boom de verano. Anticipamos un crecimiento del PIB real de alrededor del 4,5% en promedio en 2021 después de una contracción del 3,4% en 2020".
