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El ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, José Luis Escrivá, en una imagen de archivo.Lorena Sopêna - Europa Press

MADRID, 31 (EUROPA PRESS)

Gobierno y organizaciones de autónomos seguirán negociando la próxima semana el diseño del nuevo sistema de cotización por ingresos reales después de que la reunión de este lunes haya finalizado sin avances significativos, según han indicado a Europa Press en fuentes del colectivo de trabajadores por cuenta propia.

La vicepresidenta de ATA, Celia Ferrero, ha explicado que durante el encuentro de este lunes se ha presentado a los agentes sociales y a las organizaciones de autónomos la distribución de trabajadores por cuenta propia en función de la definición de rendimientos que toma el Gobierno para su propuesta.

Sin embargo, Ferrero ha señalado que, al no ser rendimientos netos, esta clasificación que hace el Gobierno entraña muchas dificultades "por el gran número de autónomos que declaran rendimientos cero o negativos".

La vicepresidenta de ATA, que ha indicado que la reunión de hoy ha sido sobre todo de carácter técnico, ha explicado que, para resolver todas las dudas que genera esta definición de rendimientos y sus implicaciones para el nuevo sistema de cotización, se ha solicitado la presencia en la mesa de negociación del Ministerio de Hacienda y de la Agencia Tributaria.

Sin embargo, fuentes del Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones han asegurado a Europa Press que es "absolutamente falso" que se haya citado a Hacienda para la próxima reunión.

Desde la cartera que dirige José Luis Escrivá también han aclarado que en la reunión de este lunes "se han resuelto dudas técnicas a los interlocutores sociales" y se han planteado nuevas consultas para continuar con los trabajos el próximo lunes.

Por su parte, la secretaria general de Uatae, María José Landaburu, ha informado en su cuenta de Twitter que no ha habido avances en la reunión de hoy ni grandes novedades.

"Seguimos lejos de un acuerdo", ha señalado Landaburu, que considera "imprescindible" que se cambie el rumbo de la negociación y el Gobierno tenga en cuenta la alternativa que ATA ha puesto sobre la mesa.

"Hemos insistido en nuestra propuesta. Tenemos que hablar de más protección y de más derechos porque los autónomos seguimos a la orilla del Estado de Bienestar", ha defendido Landaburu, que ha destacado la necesidad de que los autónomos con menores ingresos dejen de "sobrecotizar" ya.

El Ministerio de Seguridad Social planteó el pasado 10 de enero a las organizaciones de autónomos un sistema flexible de 13 tramos que van desde ingresos inferiores a los 600 euros al mes hasta más de 4.050 euros, con posibilidad de cambiar hasta seis veces al año.

Ese modelo inicial propuesto por el Gobierno establece una cuota mínima que ronda los 184 al mes para aquellos trabajadores autónomos con ingresos por debajo de los 600 euros, al tiempo que establece una máxima de 1.267 euros mensuales para aquellos que ingresen más de 4.050 euros.

Las cuotas propuestas son progresivas y se vinculan a los rendimientos de los trabajadores autónomos. El Gobierno ha propuesto inicialmente un plazo de nueve años de transición para la adaptación al sistema, aunque cada tres años se evaluaría la situación.

Uatae envió el pasado jueves al Ministerio una propuesta alternativa en la que pide que los ingresos sobre los que se calcule la cuota a la Seguridad Social descuenten "importantes gastos asociados a la actividad" de los autónomos, como las amortizaciones de inversiones realizadas para poder trabajar o la propia cuota a la Seguridad Social.

Esta organización también propone reducir la cuota mínima a 70 euros para aquellos que tengan beneficios netos reales de hasta 350 euros y "agilizar lo máximo posible" la implantación del nuevo sistema en lugar de demorarse los nueve años que plantea el Ministerio. En este sentido, desde la organización de autónomos piden que ya en 2023 sea "tangible" el "impacto positivo" de las modificaciones.

La organización de autónomos UPTA, por su parte, también ha pedido acortar el plazo de adaptación de nueve a seis años y que 2023 sea el año en el que más se note la rebaja de cotizaciones a quienes actualmente están pagando más de lo que les corresponde y, al mismo tiempo, los que más ingresan empiecen a pagar más.

La idea de UPTA es que en los tres primeros años de implantación se haga la mayor parte del recorrido.

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