SANTANDER, 11 (EUROPA PRESS)
Cantabria se ha convertido en la primera comunidad autónoma en la que el Gobierno regional y las empresas, a través de CEOE-Cepyme y las mutuas, se han unido para afrontar el problema del absentismo laboral.
Una unión que se puso en valor durante la jornada organizada este miércoles por la patronal cántabra en colaboración con Mutua Montañesa para presentar el informe del Observatorio de Absentismo Laboral elaborado por esta entidad y que contó con la participación de la presidenta de Cantabria, María José Sáenz de Buruaga.
Todos coinciden en que se trata de un "problema complejo y multifactorial" y que han de adoptar medidas cada uno desde el ámbito de sus competencias pero siempre en colaboración, ya que no sólo afecta a las empresas, que hasta abril han tenido un impacto económico negativo de 228,3 millones de euros por el absentismo, sino también a la Comunidad Autónoma en lo relativo a índices económicos y de competitividad.
El presidente de CEOE-Cepyme Cantabria, Enrique Conde, ensalzó esa unión de "empresarios y administración para abordar de forma conjunta y coordinada iniciativas que mejoren los índices de absentismo laboral, un fenómeno creciente que repercute directamente en la estructura económica y social de la comunidad".
Y, además, consideró que la adopción de medidas ha pasado de ser una opción a una obligación ya que se trata de "una realidad que no ha dejado de crecer y que supone un verdadero lastre para Cantabria".
"Ni los empresarios ni la Administración pueden resolver solos y aisladamente este problema. Necesitamos de una colaboración público-privada franca, responsable, transparente y duradera en el tiempo", dijo, al tiempo que valoró el abordaje conjunto impulsado en Cantabria.
Para ello, además de este foro organizado por CEOE-Cepyme junto a Mutua Montañesa, también se ha constituido un grupo de trabajo en la Consejería de Salud con el Instituto Nacional de Seguridad Social (INSS), la CEOE y las mutuas para abordar propuestas de mejora, tal y como señaló Sáenz de Buruaga en su intervención.
228,3 MILLONES EN PÉRDIDAS HASTA ABRIL
El absentismo laboral en Cantabria hasta el cierre del mes de abril de 2024 dejó un impacto económico negativo en las empresas regionales de 228,3 millones de euros, un 21,6 por ciento más que en los cuatro primeros meses del pasado año, según el informe elaborado por Mutua Montañesa.
En concreto, las jornadas de trabajo perdidas por trabajadores de baja laboral ascendieron hasta abril a 1.364.916, lo que supone un 10,8% más que en el mismo periodo de 2023, y de ellas el 13% fueron por bajas asociadas a accidente laboral o enfermedad profesional y el 87% a contingencias comunes.
En total, entre enero y abril de este año, fueron 11.280 trabajadores los que no acudieron a trabajar cada día por diferentes procesos de incapacidad temporal, lo que supone una media de 6,03 días por trabajador.
Estos son los principales datos del informe del Observatorio de Absentismo Laboral de Mutua Montañesa, que además anticipa una "perspectiva de mejora" en las bajas por Accidente de Trabajo (AT) y de "continuo empeoramiento" de las que responden a la Enfermedad Común (CC), situando las jornadas perdidas en torno a las 4.005.504 al término de 2024.