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REUTERS/Brendan McDermid

Los expertos pasaron a principios de año de pronosticar contundentemente una recesión en 2023 a predecir que ésta sería leve (especialmente en Europa) y ahora, a tenor de los datos macro que se están publicando, parece incluso que podría no materializarse, según la analista sénior de Swissquote Bank, Ipek Ozkardeskaya.

Dice Ozkardeskaya que, hoy por hoy, "está ocurriendo justo lo contrario" de lo que se preveía a principios de año.

"¿Una recesión que afectaría a la renta variable e impulsaría a la renta fija? Pues olvídense de todo eso, no está ocurriendo. Si nos fijamos en los datos, lo que está sucediendo es exactamente lo contrario", comenta.

Estas cifras no son "lo que cabría esperar de una economía que camina hacia la recesión"

Los datos de empleo de Estados Unidos siguen siendo sólidos. El país ha anunciado que en enero se crearon 517.000 puestos de trabajo, cuando la previsión era de 185.000. Además, los datos de ventas al por menor que se han conocido esta semana también reflejan esa fortaleza económica. "Fueron la guinda del pastel, con un espectacular aumento del 3% en las ventas al por menor el mes pasado, el mayor salto de los últimos dos años", remarca Ozkardeskaya.

Aunque reconoce esta experta que los datos de ventas minoristas podrían verse afectados por la estacionalidad, remarca que la gente gastó más en todas y cada una de las categorías: las compras de coches de dispararon y la vivienda recibió un impulso gracias a la bajada de los tipos hipotecarios en los dos últimos meses. La única categoría menos prometedora fue la de la energía, con las ventas de gasolina estables.

Pero la parte de las ventas que influye en el cálculo del PIB -que de todos modos excluye la gasolina, los automóviles y los materiales de construcción- subió un 1,7%.

En cuanto a la producción, las noticias son casi igual de buenas, subraya la analista. "La producción industrial no varió, pero se debe sobre todo a que el clima cálido provocó una caída del 10% en los servicios públicos. Pero, aparte de eso, la producción manufacturera aumentó un 1% y la minera, un 2%", precisa.

NO SON LO QUE CABRÍA ESPERAR DE UNA RECESIÓN

Ipek Ozkardeskaya tiene claro que estas cifras no son "lo que cabría esperar de una economía que camina hacia la recesión".

"Todo esto es una gran noticia, pero claramente no es lo que esperábamos ver", indica. Tampoco se esperaba ver a la renta variable subiendo (y encima con esta fuerza) mientras que la renta fija baja, en contra de lo que todos preveían a comienzos de año, cuando se anticipaba un 2023 sólo de tibia recuperación (como mucho) para las bolsas.

Desde Link Securities explican que todas estas cifras macro se podrían interpretar también como que la Reserva Federal (Fed) tiene más margen para subir los tipos, lo que aumentaría ese riesgo de recesión. Sin embargo, como Swissquote Bank, entienden que la fortaleza del consumo con los actuales niveles de tipos sugiere que será complicado que, al menos en el corto/medio plazo, la economía estadounidense pueda entrar en recesión.

Este escenario, el que supone que al final la recesión se esquive, es el que estaría apuntalando la buena evolución de los índices. Cabe recordar que, en lo que respecta a Estados Unidos, el consenso daba por hecho una recesión este año. En cuanto a Europa, algunos apostaban porque podría esquivarla, pero la mayoría estima que habrá y que será leve.

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