La tasa de desempleo de la Eurozona cerró el 2020 en el 8,3%, cifra que no varió en diciembre respecto a noviembre. De la misma forma, se mantuvo estable en el 7,5% durante el último mes del año frente al anterior en el conjunto de la Unión Europea (UE), según ha informado la oficina de estadística comunitaria, Eurostat.
En términos interanuales, España se apuntó la segunda mayor subida del desempleo entre los Estados miembros de los que Eurostat ha publicado datos este lunes, ya que el indicador subió 2,5 puntos porcentuales frente a diciembre de 2019, alcanzando una tasa del 16,2%, y registrando un ascenso idéntico al anotado en Irlanda.
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El desempleo en la zona euro creció nueve décimas respecto al 7,4% registrado en diciembre de 2019, mientras que entre los Estados miembros la subida en el mismo periodo fue de hasta un 1%, partiendo del 6,5%.
Por países, los mayores aumentos interanuales en diciembre del año pasado se registraron en Lituania, (con un 3,7% más, hasta el 10,1%), España (con 2,5 puntos, hasta el 16,2%), Irlanda (2,5%, hasta el 7,2%), Letonia (1,7%, hasta el 8,2%) y Austria (1,5%, hasta el 5,8%).
En términos mensuales, Austria experimentó el mayor incremento del paro entre noviembre y diciembre, con un 0,3% más, alcanzando el 5,8%, mientras que en España creció una décima respecto al mes anterior.
En cuanto al desempleo juvenil, que comprende a los menores de 25 años, aumentó tres puntos porcentuales a nivel interanual tanto en los países del euro, alcanzado el 18,5%, como en todo el territorio comunitario, situándose en un 17,8%. Los incrementos mensuales fueron de cuatro décimas en la eurozona y tres décimas en la UE.
Según los datos publicados, basados en los criterios que sigue la Organización Internacional del Trabajo (OIT), Eurostat ha explicado que la pandemia de coronavirus y las medidas aprobadas para mitigar las oleadas de contagios han provocado un "fuerte aumento en el número de peticiones de prestaciones por desempleo" en la UE.
De la misma forma, "una parte significativa" de las personas que se habían inscrito en las oficinas de empleo no estaban buscando empleo de forma activa o no podían trabajar si, en algunos casos, tenían que cuidar de sus hijos. Esa situación ha resultado, según la oficina de estadística, en discrepancias entre el número de desempleados registrados en las oficinas de desempleo y el número calculado según la definición de la OIT.
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