- El mayor problema son los frescos: todavía hay mucha desconfianza sobre la calidad y su transporte
- Las entregas 'ultra-rápidas' están cada vez más a la orden del día y ayudan a derribar barreras
El comercio electrónico forma ya parte de nuestro día a día. Son muchos los que han tomado como costumbre navegar por la red y hacer ahí sus compras, no sólo de ropa o tecnología, sino también de alimentación. Llenar el carrito de la compra sin esfuerzo y sin cargar con pesadas bolsas es una práctica cada vez más extendida, aunque sólo supone entre el 1% y 2% del total de las ventas de alimentación en España. Sin embargo, las cosas podrían cambiar en apenas dos años, ya que algunos expertos aseguran que seguirá incrementándose hasta multiplicarse por seis en 2020.
El mayor problema es la falta de confianza que sigue generando entre los españoles la compra de productos frescos a través de Internet
El e-commerce va ganándose poco a poco a los españoles. De hecho, según los datos de la agencia estadística europea Eurostat, en 2017 la mitad de los consumidores realizaron alguna transacción online, aunque relacionada mayoritariamente con la gestión de viajes y el transporte aéreo (30%) o la moda (27%). La penetración del comercio electrónico de alimentación se incrementó el año pasado en un punto porcentual, pasando del 7% registrado en 2016 al 8% en 2017, y aunque la mejora está ahí, lo cierto es que aún queda mucho camino por recorrer y muchas barreras que derribar, especialmente la de la desconfianza.
Sobre todo porque la falta de confianza que sigue generando la compra de productos frescos a través de Internet está siendo una piedra en el camino para todos los que se dedican a la venta de alimentos online. Poco a poco los españoles están dejando a un lado sus reticencias, gracias entre otras cosas a las iniciativas de entrega 'ultra-rápida' que han puesto en marcha diversas compañías para hacer frente, precisamente, a las reservas de los consumidores a la hora de comprar productos perecederos vía Internet, por el miedo a que se estropeen por el camino.
“Los frescos siguen comprándose por el canal físico”, explica Aurelio del Pino, presidente de la Asociación de Cadenas Españolas de Supermercados (ACES). Aunque no cree que esto tenga que ver con una falta de confianza de los consumidores en la calidad de los productos o en que lleguen en buen estado, sino con el hecho de que la distribución física en España “es muy capilar y eficiente”, de forma que “siempre hay un súper a mano”, por lo que “no hay tanta necesidad de acudir al comercio electrónico como en otros países, como sí ocurre a la hora de adquirir productos de otros sectores en los que es más difícil encontrar tienda física”, explica.
EL 92% DE LAS COMPRAS, EN TIENDAS FÍSICAS
Según datos de Kantar Worldpanel, el sector del gran consumo (alimentación envasada -sin frescos-, droguería y perfumería) representa un 1,9% del mercado español. Así lo pone de manifiesto en el informe 'Balance de la Distribución y el Gran Consumo 2017', en el que desvela que el canal online sigue su lento, pero constante, avance, de forma que el año pasado 4,7 millones de hogares realizaron alguna compra de gran consumo a través de Internet.
Estos hogares dedican, de media, un 8% de su presupuesto a las compras online, por lo que todavía realizan el 92% en tiendas físicas, lo que demuestra que “el consumidor no renuncia a la tienda física, que debe reinventarse y adaptarse a la omnicanalidad que viene”, destaca Florencio García, director del Sector Minorista en Iberia de la firma. En noviembre, la consultora daba a conocer otro informe, 'El futuro del e-commerce', en el que García explicaba que el peso de la venta online de los productos alimenticios “es todavía muy bajo en comparación con otros países cercanos”. De hecho, si se habla de productos frescos, “la cuota de mercado se reduce al 0,5% y el ritmo de crecimiento es inferior”.
Algunos expertos apuntan que la venta de alimentos frescos por Internet se multiplicará por seis en apenas dos años
García apuntaba que los frescos representan “la mitad del gasto en alimentación de los españoles”, por lo que su gestión es “clave” para cualquier operador que quiera triunfar en el mercado español, y ponía el acento en el reto que plantean las horas de entrega y la devolución. Desde ACES apuntan a una penetración de entre el 1% y el 2% incluyendo frescos, un “porcentaje pequeño pese a que existen muchas opciones para comprar alimentos online”, señala Del Pino, y eso que han surgido iniciativas para la entrega 'contra reloj' de estos productos, como la 'Prime Now' de Amazon, que permite servir alimentos y otros artículos en una hora, o el 'Click&Express' de El Corte Inglés, con entregas en menos de dos horas de alimentación, productos gourmet, pero también moda, complementos, perfumería cosmética o tecnología.
No obstante, el potencial de crecimiento está ahí, como defienden los expertos, y eso propiciará un incremento de la penetración de la venta online de alimentos en los próximos años. Así lo atestigua un informe de la consultora Oliver Wyman publicado en enero, que vaticina que la venta de alimentos frescos por Internet se multiplicará por seis en apenas dos años. Según sus previsiones, la comercialización de este tipo de productos representará en 2020 entre el 4% y el 6% de la cuota en el sector de la alimentación, frente al poco más del 1% actual.
Ya lo decía en 2014 el director de Servicios Analíticos de Nielsen Iberia, Francisco Bernabé, cuando el e-commerce con base alimentaria en España suponía el 0,6% del total de ventas del mercado de gran consumo: “Los consumidores españoles están listos para el cambio. Lo único que falta es que la distribución apueste fuerte por el e-commerce en su estrategia, como ya ha hecho el sector textil”. Y en ello están las empresas que se dedican a la venta de alimentos online.
¿CUÁNTO GANAN LOS 'SÚPER' POR VENTAS ONLINE?
Una de ellas es Mercadona, la empresa fundada por el valenciano Juan Roig. Célebre es ya su frase, pronunciada hace un año, en la que aseguraba: “Nuestra página web es una mierda”. Con estas palabras dejaba ver lo mucho que le quedaba por hacer a la compañía para no dejar escapar las oportunidades que ofrece la venta online, y el equipo de Mercadona ya se ha puesto manos a la obra para reformular el 'site' del supermercado y llegar así a más gente.
En la venta física Mercadona es el rey. Según datos de Kantar Worldpanel, la cadena de supermercados alcanza el 24,1% del mercado. De hecho, nueve de cada diez hogares españoles compraron al menos una vez en los establecimientos de la firma valenciana el año pasado. Aunque todavía tiene mucho por hacer. Y es que según sus resultados de 2016 (los últimos disponibles, ya que los de 2017 todavía no se han dado a conocer), el comercio online supone aproximadamente un 1% de las ventas totales, que ese año alcanzaron los 21.623 millones de euros.
En España la segunda cadena en cuota de mercado es Carrefour, con un 8,7%. La firma no ha facilitado a 'Bolsamanía' datos de su venta online, pero según recogía Reuters en enero la compañía francesa se ha puesto como objetivo acelerar la inversión en comercio electrónico ante la competencia de gigantes como Amazon. De hecho, el consejero delegado Alexandre Bompard, se ha comprometido a invertir 2.800 millones de euros en este campo de aquí a 2022 para dar un nuevo impulso digital a la cadena, y se ha puesto como objetivo que Carrefour alcance los 5.000 millones de euros en ventas online de alimentos en cuatro años, una cantidad que sería seis veces mayor que la actual.
El podio en España lo completa DIA. Logra un 8,2% de cuota de mercado, según Kantar Worldpanel, aunque también ha puesto el foco en el comercio electrónico. De hecho, la cadena de supermercados acaba de ampliar su acuerdo de compra online con el gigante Amazon, y tras el éxito cosechado en Madrid y Barcelona, próximamente desembarcará en Valencia. En sus resultados del tercer trimestre, los últimos disponibles (presentará sus cuentas de los últimos tres meses y del total de 2017 el 22 de febrero), la cotizada aseguraba que las ventas del canal online en España ascendieron a 40,2 millones de euros entre enero y septiembre, multiplicando así 2,9 veces el importe registrado en el mismo periodo del año anterior.
En 2016 las ventas online de Mercadona sólo supusieron un 1% de las ventas totales, que ese año alcanzaron los 21.623 millones de euros
Aunque DIA, sabedora de la importancia del canal online, no se conforma y se ha puesto como objetivo alcanzar los 120 millones de ventas por Internet para 2020.
Sobre el gigante del comercio electrónico, Amazon, Kantar Worldpanel señala en su último informe que “el 56% de los compradores de las grandes cadenas han realizado alguna compra de cualquier producto en la plataforma en 2017”. La firma no deja de ganar adeptos, incluso en un campo tan complicado como se está mostrando el de la alimentación, aunque no da cifras sobre lo que supone la venta online de comida. La firma estadounidense lanzó en España su tienda de alimentación en septiembre de 2015 para productos no perecederos, y desde verano de 2017 vende productos frescos a través de su servicio 'Prime Now' (disponible para clientes de Madrid, Barcelona y sus localidades limítrofes).
Por último, merece una mención especial el caso de El Corte Inglés. En sus resultados de 2016 (publicados en agosto de 2017) sólo especifica que su negocio online ha aumentado a un ritmo que duplica el crecimiento del mercado español, con un 60% más de pedidos, un 40% más de facturación y un 25% más de tráfico a la web, aunque no especifica cifras concretas.
Eso sí, la firma que preside Dimas Gimeno presume de haber sido la primera en ofrecer su catálogo de alimentación a través de Internet, algo que hace desde 1999. Ahora cuenta incluso con una app que recrea los pasillos del supermercado y en la que incluye toda la información sobre los productos para el cliente, que puede comparar características y precios desde el sofá de casa. Con ella se puede también personalizar los frescos: elegir el corte o el modo de prepararlos, como si se tratase de una tienda física.