- El dinero destinado a esta partida ha aumentado un 48% desde que comenzó la crisis
- El acceso a la vivienda es la partida que más ha sufrido en la última década
España ha dado un primer paso para tener Presupuestos en 2018. El país aún ‘vive’ con las cuentas prorrogadas de 2017 y los nuevos PGE deben recorrer un largo camino para ser aprobadas definitivamente. Ya se conocen las partidas que se destinarán a cada una de las políticas con estos Presupuestos que, según dice el Gobierno, son ya los de una España en expansión. Lo que está claro es que las cuentas públicas han cambiado mucho en estos últimos 10 años.
Durante esta década, España ha vivido una crisis financiera profunda de la que todavía se está sacudiendo los restos. No obstante, los datos macroeconómicos han mejorado claramente. De hecho, la economía creció al 3,1% en 2017, en su cuarto año consecutivo de crecimiento. Este avance se refleja, tal y como quiso resaltar el Gobierno, en los Presupuestos Generales del Estado, presentados este martes por el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, en el Congreso.
Hay que destacar que en 2009, la economía cayó un 3,6%. En 2010 no hubo variación, pero en 2011 volvió a caer un 1% y en 2012 el PIB se contrajo un 2,9%. 2013 fue el último año en el que cayó la economía española: -1,7%. A partir de ese momento, se han registrado constantes crecimientos, siendo el mayor el de 2015, del 3,4%.
El Gobierno se gastará este 2018 un total de 327.955 millones de euros, lo que representa un 3% más que el Presupuesto de 2017, que todavía está prorrogado para estos meses de 2018. Los PGE presentados este martes también son un 12,6% superiores a los de 2008 (inicio oficial de la crisis), cuando el Gobierno, presidido entonces por el socialista José Luis Rodríguez Zapatero, contó con 291.191 millones de euros.
Sin embargo, las cuentas presupuestadas para este 2018 son un 6,5% menores que los 350.695 millones de euros de 2011, último año de Zapatero en el Gobierno y el previo al anuncio oficial del rescate (febrero de 2012). Durante estos diez años no sólo han cambiado los Presupuestos, sino que el mercado laboral español se ha transformado radicalmente. Y no es el único aspecto que se ha dado la vuelta.
EL ACCESO A LA VIVIENDA, LA MÁS DAÑADA EN ESTOS ÚLTIMOS 10 AÑOS
Del total de las partidas de gasto por políticas, un total de 12 han reducido su cantidad en comparación 2008. Entre ellas, destaca el dinero presupuestado para el acceso a la vivienda, las infraestructuras, el fomento del empleo o la cultura.
El dinero destinado al acceso a la vivienda ha sido el que más ha sufrido en estos años. La partida cuenta con 474 millones de euros para 2018, un 65% menos que los 1.378 millones de euros de 2008. Esta partida tuvo su pico de dinero en 2009 con 1.616 millones de euros, pero año tras año se ha ido reduciendo. Sin embargo, hay que destacar que este 2018 será el primero que crezca desde 2009. La dotación para política de vivienda sube un 1,3% en 2018, hasta los 473 millones.
De este importe, el 94,4% corresponde a las dotaciones para la promoción, administración y ayudas para la rehabilitación y acceso a la vivienda, que contiene, entre otros, los créditos destinados a ejecutar los planes estatales a través de los que se desarrolla la política de vivienda asumida por el Estado.
Las ayudas al alquiler recogidas en el Plan de Vivienda para el periodo 2018-2021, recientemente aprobado por el Ejecutivo, son uno de los ejes centrales de los planes estatales, que inciden tanto en la demanda como en la oferta.
En esta década, protagonizada por la crisis económica, la cultura no ha sido la principal preocupación de los gobiernos
Otra partida 'dañada' en esta crisis ha sido la de infraestructuras. De hecho, el dinero que se destinará este año a infrestructuras es un 61% menor que en 2008. El Gobierno ha presupuestado para 2018 un total de 5.675 millones de euros, frente a los 14.690 millones de 2008. Durante la crisis, uno de los sectores que más se ha visto perjudicado ha sido el fomento de obras públicas y construcciones de infraestructura, y para muestra, un botón. Si se revisan las partidas presupuestarias se puede apreciar que la mayor rebaja la sufrió en 2011, cuando redujo su presupuesto en casi 6.000 millones de euros.
La partida de política exterior también ha visto cómo su presupuesto se ha reducido drásticamente en estos 10 años. Así, ha pasado de 3.468 millones de euros de 2008 hasta los 1.581 millones de 2018, una caída del 54%. No obstante, es un 4% más que en 2017. La partida más cuantiosa de la política exterior es la dedicada a la acción del Estado en el exterior, 792 millones de euros, pero apenas un 1,5% más que en 2017.
Cultura es otra de las partidas que hay que destacar. En esta década, protagonizada por la crisis económica, la cultura no ha sido la principal preocupación de los gobiernos. En 2008 contaba con un presupuesto de 1.220 millones de euros y este 2018 se han presupuestado 838 millones de euros, un 31,3% menos.
Sin embargo, hay que destacar que ha aumentado un 4,7% desde 2017 y es la primera vez que sube esta partida desde 2009. Además, es la cifra más alta que el Ejecutivo destina en los últimos seis años a la cultura.
Por otro lado, la partida de Industria y Energía es la que más ha aumentado en estos 10 años. El Gobierno ha presupuestado para este 2018 un 148% más que en 2008, cuando esta partida contaba con 2.324 millones de euros. También ha aumentado en referencia a 2017 un 6%. La mayor parte del presupuesto, el 74,2%, corresponde a partidas destinadas a financiar la normativa y desarrollo energético, con un total 4.277,93 millones de euros. En concreto, la mayor parte de las dotaciones en materia de energía se corresponden con partidas destinadas a financiar costes del sistema eléctrico para contribuir al equilibrio financiero del sistema.
La partida destinada a la Deuda es la segunda que más ha aumentado en estos diez años, casi un 90%, hasta los 31.547 millones de euros desde los 16.609 millones de euros de 2008. Hay que destacar que la deuda española llegó a suponer el 100,7% del PIB en el segundo trimestre de 2016, el máximo alcanzado en un siglo. No obstante, el Gobierno destinó en 2013 la mayor cantidad de dinero de los últimos diez años al pago de intereses: 38.590 millones de euros.
Actualmente, la deuda española se encuentra en el 98,12% del PIB. El ministro de Hacienda señaló, durante la presentación de los PGE en el Congreso, que se han marcado como objetivo reducirla al 97% durante este año.
MEJORA EL EMPLEO, PERO ¿QUÉ PASA CON EL DINERO DESTINADO?
Sólo hay dos partidas que reducen su cantidad para este 2018 respecto al año anterior. Una de ellas es la partida destinada a la deuda, en casi un 2%, y la segunda es la de desempleo. El Gobierno ha presupuestado un total de 17.702 millones de euros para 2018 para las prestaciones por desempleo, lo que representa un 3,4% menos que en 2017. No obstante, es un 12% mayor que los 15.777 millones de euros de 2008.
El Gobierno justifica este descenso por "la mejora de la economía que se viene registrando en los últimos años". Sin embargo, los datos de desempleo, publicados también este martes, muestran que el número de desempleados en España aún está por encima de los 3,4 millones. No obstante, esta cifra se encuentra muy por debajo de los poco más de 5 millones de desempleados de marzo de 2013.
Asimismo, la tasa de desempleo aún se encuentra en cifras elevadas, en el 16,55%. También es un porcentaje que está lejos del del primer trimestre de 2013, cuando se rozó el 27% de paro. En este punto hay que destacar que en estos 10 años el dinero destinado al fomento del empleo se ha reducido en un 26%. No obstante, este último año, el Gobierno ha presupuestado un 4% más, hasta los 5.716 millones de euros para esta partida.