- Cree que Estados Unidos está en proceso de aclimatarse
- Niega que haya sido una reunión bronca
El ministro de Economía, Industria y Competitividad, Luis de Guindos, ha rechazado que el G-20 de Finanzas celebrado hasta este sábado en la ciudad de Baden-Baden, en el sur de Alemania, fuese uno de los más broncos a pesar de la resistencia de Estados Unidos, que ha vetado una declaración final a favor del libre comercio.
"No hubo controversia, en absoluto. Lo que hemos defendido todos es un 'no al proteccionismo', un 'no' a la volatilidad de los tipos de cambio como instrumento para ganar de forma artificial competitividad y también que el libre comercio tiene un impacto positivo en la economía mundial", ha afirmado De Guindos en declaraciones a la prensa.
El encuentro ha reunido durante dos días a ministros de Finanzas y gobernadores de bancos centrales de los países del G-20, así como a otros organismos económicos multilaterales. La cita ha estado marcada desde su comienzo por una falta de consenso en torno a la defensa del libre comercio debido a la postura de la nueva Administración estadounidense, más partidaria de postulados proteccionistas.
"Hemos llegado a un acuerdo en el comunicado final en el punto que era más controvertido, el referido al comercio, donde señalamos que todos somos favorables al libre comercio y que analizaremos cómo este libre comercio tiene un impacto positivo desde el punto de vista de la evolución de la economía mundial y desde el punto de vista de la prosperidad", ha argumentado De Guindos.
ESTADOS UNIDOS, CENTRO DE LOS DEBATES
El ministro español añadió además que en el seno del encuentro no llegaron a abordarse los planes de la Administración de Donald Trump, que pretende imponer aranceles a las importaciones. "No ha habido discusiones de detalles sino una discusión de principios y ha habido acuerdo en todo lo que es positivo para la economía mundial. Creo que esta es una Administración que acaba de llegar y se está acomodando a las reuniones del G-20", ha apuntado.
Al término del encuentro multilateral, Luis de Guindos hizo un balance positivo porque a lo largo de dos días se han abordado cuestiones importantes como la arquitectura financiera internacional, el intercambio fiscal, la lucha contra los paraísos fiscales o el compromiso por el desarrollo en África. El ministro español mantuvo en Baden-Baden varias reuniones bilaterales, entre otras, con sus homólogos de Argentina, México, Reino Unido y Australia.
Aunque no forma parte del G-20, España acude a las reuniones en calidad de invitado permanente. El G-20, cuya presidencia rotativa anual ejerce Alemania desde el pasado mes diciembre, está formado por la Unión Europea y 19 países industrializados y emergentes que participan en un foro de cooperación de un conjunto de países que representan dos tercios de la población mundial y tres cuartas partes del comercio mundial.