El exgobernador del Banco de España (BdE) Pablo Hernández de Cos es el principal favorito para suceder a Agustín Carstens al frente del Banco de Pagos Internacionales (BPI), según una exclusiva de 'Bloomberg' elaborada con fuentes cercanas al organismo.
Las mismas fuentes confirman que De Cos cuenta con apoyos en Europa, América Latina y EEUU, lo que lo coloca en una posición privilegiada para ser elegido máximo responsable, aunque por ahora no se ha hecho pública ninguna decisión formal al respecto.
De confirmarse el nombramiento, el exgobernador del BdE asumiría el cargo por un periodo renovable de cinco años, y se convertiría en el primer español que preside el organismo, conocido como el banco de bancos centrales.
Además, De Cos tendría que desplazarse a Basilea para realizar sus tareas, entre las que destaca principalmente el seguimiento constante de la economía global para emitir alertas tempranas en caso de identificar alguna posible amenaza para el bienestar de las naciones.
Esta institución se encarga también de velar por la seguridad del sistema financiero, por lo que continuamente alerta sobre los riesgos de las entidades y reclama mayores controles, después de que este papel se intensificara a raíz de la gran crisis global iniciada en 2008.
"En un área como la política de estabilidad financiera, que por su propia naturaleza implica monitorear la acumulación de condiciones que causan crisis, es importante que la comunidad internacional cuente con una institución internacional que esté preparada para desafiar el consenso del mercado y la formulación de políticas", recoge sobre el BPI Andrew Baker, profesor de la Universidad de Sheffield, en un capítulo de uno de sus libros.
