El próximo viernes, 24 de noviembre, comienza el Black Friday 2023 y, tanto los establecimientos físicos como los ecommerce, se preparan para uno de los periodos de más compras del año. Los consumidores que deciden realizar sus compras online y tienen una serie de derechos que normalmente son desconocidos, recogidos por Legálitas.
Así, la entrega del paquete siempre tiene que realizarse por el vendedor a la persona que actúa como comprador y en la dirección física indicada por este en el proceso de la compra online. Entregar el paquete a una persona distinta o en una dirección diferente a la indicada supondría un "incumplimiento del contrato del que se derivarían consecuencias legales oportunas" como la devolución del dinero al comprador y responder de los daños y perjuicios que se puedan demostrar.
También es irregular que el repartidor deje en la puerta o en el rellano de una vivienda un paquete, ya que al no existir ninguna constancia de recepción por parte del destinatario, se podrá reclamar la entrega de un nuevo producto o a la devolución del importe de la compra.
Por otro lado, si un consumidor compra un producto pero posteriormente no hay existencias, se tiene también derecho a la devolución del dinero pagado en concepto de precio, así como el derecho a exigir una indemnización en atención a los daños y perjuicios que dicha situación le hubiera podido provocar. Estas mismas consecuencias se producirán si el vendedor no cumple con la obligación de entregar el artículo en el plazo convenido.
Si el paquete no llega en buenas condiciones, el Código Civil impone al vendedor la obligación de responder frente al comprador de que la entrega del artículo se produzca en las debidas condiciones, por lo que si sucede, deberá reponer el artículo o devolver el dinero de la compra.
