El número de usuarios del transporte público en España registró en abril, primer mes completo de confinamiento por el coronavirus, un desplome récord del 91,4% en comparación con el mismo mes de 2019 y se quedó en 36,1 millones de viajeros (frente a 422,2 millones de abril del año pasado), según informa hoy el Instituto Nacional de Estadística (INE).
Diez millones de personas utilizaron el transporte interurbano, lo que supone un descenso del 91,3% respecto al mismo mes de 2019. Por tipo de transporte, el aéreo resultó el más castigado y baja un 99%, hasta los 37.000 viajeros; el marítimo pierde un 95,7%, el ferrocarril un 91,1%, y el autobús un 91%.
Cercanías desciende un 90,7% en el transporte por autobús y un 90,5% en el transporte por ferrocarril. La media distancia baja un 91,2% en el transporte por autobús y un 93,7% en el ferroviario. Por último, la larga distancia disminuye un 97,7% en el transporte por autobús y un 98,7% en el ferrocarril. Dentro de este último, el AVE baja un 98,5% y merma su clientela hasta los 28.000 viajeros.
El transporte urbano por autobús se suspendió en abril en algunas ciudades y en otras se ofreció de forma gratuita. Este diferente comportamiento se ha visto reflejado en las tasas anuales por comunidades autónomas, aunque todas están por debajo del −85,4% que registra Principado de Asturias.
Como consecuencia de las disposiciones del estado de alarma, el transporte especial escolar, en el que se incluye también el transporte de ancianos o de personas con discapacidad a centros de día o especializados, se ha visto reducido prácticamente a cero (−99,8%).
Por último, el transporte especial laboral registra la menor bajada en abril, con una tasa anual del −54%.